La soja cerró la rueda con precios en alza el viernes, pero completó la semana con saldo negativo en Chicago. La posición marzo 2025 cerró en US$/t 360 (-1,6%). El repunte del viernes, que incluyó a la harina (la posición enero sumó US$ 11,46 y terminó la jornada con un ajuste de US$ 324,63 por tonelada), se dio por una continuidad de las compras de ocasión de los inversores tras las fuertes bajas registradas entre el pasado lunes y el miércoles. Contribuyen con este repunte la noticia sobre una operación hecha por el comprador chino Sinograin de unas 500.000 toneladas de grano estadounidense y el paso adelante que por segunda jornada consecutiva está dando el real frente al dólar, en medio del proceso de fuerte devaluación de la moneda brasileña durante el presente año.
El límite a las mejoras lo pusieron las favorables condiciones ambientales para la producción en Sudamérica, que de momento apuntalan las perspectivas de una oferta regional récord, y la caída del valor del aceite (el contrato enero bajó US$ 11,68 y terminó la jornada con un ajuste de US$ 870,37 por tonelada), que fue en sintonía con el descenso de las cotizaciones del aceite de palma en Malasia –completaron la segunda semana negativa seguida– y con el incierto rumbo que tomarán la demanda del subproducto de la soja y la industria del biodiésel a partir del 20 de enero, con Trump en el poder.
En su revisión semanal de las previsiones de exportaciones brasileñas, la Asociación Nacional de Exportadores de Cereales de Brasil (ANEC) elevó su estimación sobre las ventas de soja durante diciembre de 1,57 a 1,62 millones de toneladas, contra los 2,34 millones de noviembre y los 3,78 millones del último mes de 2023. En cuanto a la harina de soja, la entidad incrementó el cálculo para las ventas del presente mes de 1,90 a 2,18 millones de toneladas y lo ubicó por encima de los 1,73 millones del mes pasado y de los 1,97 millones del año anterior.
Trigo bajó 3,5%
Por otro lado, tras una rueda volátil, el trigo cerró con ligeros altibajos en las plazas estadounidenses, donde la semana dejó un claro saldo negativo. La posición marzo en Chicago cerró a US$/t 195, perdiendo 3,5% en la semana.
La presión sobre las cotizaciones la aportaron las buenas perspectivas para el cierre de las cosechas en la Argentina y en Australia, además de la firmeza del dólar contra el euro, muy parcialmente revertida el pasado viernes.
El límite a las pérdidas lo aportó el Kremlin, que el viernes redujo de 11 a 10,60 millones de toneladas el ya reducido cupo para las exportaciones de trigo ruso entre el 15 de febrero y el 30 de junio. "La decisión se tomó teniendo en cuenta el balance proyectado de la producción y el consumo de cereales en el mercado interno", indicó el gobierno en un comunicado. Cabe recordar que el año pasado el cupo, que incluía al maíz y a la cebada, fue de 29 millones de toneladas. Se calcula que el trigo tuvo poco menos del 80% de participación en ese volumen.
A lo antedicho hay que sumar el actual mal estado de los cultivos de invierno en Rusia, que enciende las alarmas en la previa del invierno, sobre todo si las temperaturas extremas encuentran a las plantas atrasadas en sus etapas evolutivas.
En Francia, FranceAgriMer redujo del 87 al 86% la proporción de trigo blando en estado bueno/muy bueno, un dato que se ubicó por encima del 77% de igual momento de 2023. Con la cosecha recién finalizada, la ANEC prevé las exportaciones brasileñas de trigo durante diciembre en 357.712 toneladas, por encima de las 95.931 toneladas despachadas en noviembre, pero por debajo de las 460.376 toneladas de igual mes de 2023. Fuente: Granar Research