Remates
El consorcio Plaza Rural cerró este miércoles su remate 295 de noviembre con una fluida colocación y valores firmes para las distintas categorías. Los 2.749 terneros (100% de ventas) hicieron un promedio de US$ 2,63 por kg (US$ 527 al bulto), por encima de la media de US$ 2,59 (US$ 512 al bulto) del primer remate del mes. En tanto, las terneras (98% de ventas) promediaron US$ 2,26 con 2.904 cabezas comercializadas. Por su lado, las 3.451 piezas de cría hicieron un promedio US$ 478 al bulto, con 100% de ventas.
El consorcio Lote21 cerró el pasado viernes su segunda actividad de noviembre con una fluida colocación (97% de ventas) El remate 217 dejó una referencia promedio de US$ 2,62 por kg en pie para los terneros (US$ 534 al bulto), de US$ 2,20 para las terneras (US$ 426 al bulto), de US$ 2,39 para los novillos de 1 a 2 años; de US$ 2,17 par los novillos de 2 a 3 años, y de US$ 1,69 para la vaca de invernada. Las piezas de cría promediaron US$ 456.
Nuevamente desde el Club Fuerza Aérea, Lote21 estará realizando este viernes 22 su remate 217 con 6.000 vacunos y 1.200 lanares desde las 9 am, con sanidad Microsules y financiación Santander. Como siempre, la actividad se estará transmitiendo a través de VTV Rural y la App de Lote21. En la misma se puede utilizar el Pique21, y las distintas herramientas como cálculo de flete, pique en línea para no perderse ningún lote y la calculadora de Lote21 para los créditos en línea.
El consorcio Lote 21 cerró su primer remate de noviembre con un 99% de ventas y una fluida colocación en las distintas categorías. Los terneros hicieron un promedio de US$ 2,59 por kg en pie (US$ 502 al bulto), y los novillos de 1 a 2 años US$ 2,31 (US$ 660 al bulto).
El consorcio Plaza Rural cerró este miércoles su primer día de actividad del remate 294 con una ágil y fluida colocación total de su oferta en la escalera de reposición. Los 1.307 terneros hicieron un promedio de US$ 2,59 por kg en pie (US$ 512 al bulto), las 1.841 terneras US$ 2,18 (US$ 463 al bulto), los novillos de 1-2 años US$ 2,27 (US$ 728 al bulto), y los de 2-3 años US$ 2,13 (US$ 856 al bulto).
Prácticamente con el cierre de la zafra la demanda por toros parece incrementarse, con remates exitosos y ventas totales en la mayoría de las subastas. La primavera se afirma, los valores de la hacienda acompañan, tanto para el gordo como en el caso de la reposición, y eso ha ayudado a que una zafra muy concentrada, que en muchos casos atomizó a los productores con más de cuatro ventas a la misma hora en distintos puntos del país, lograra transcurrir con ventas prácticamente que totales en las pistas de venta y subastas virtuales.
Si miramos la zafra por volumen colocado en cada departamento, Durazno (927), Artigas (561) y Tacuarembó (528) son los que han comercializado más reproductores.
En el caso de Durazno, se han comercializado 927 toros a un promedio de US$ 3.502, con el 62,2% de los toros comercializados por debajo. En el departamento se vendieron 506 toros Aberdeen Angus a US$ 3.089 de promedio y 256 toros Hereford (mochos y astados) a US$ 4.162. Además, se vendieron 165 reproductores de las razas Brangus, Braford y Shorthorn.
“Sin dudas que fue una zafra que superó las expectativas, con una altísima colocación en los distintos eventos respecto a otras zafras, y cono valores superiores. En nuestro caso, creo nos quedaron dos o tres toros en un par de remates”, dijo a Informe Tardáguila Alejandro Zambrano, director de Zambrano & Cía.
Aunque todavía queda algún remate puntual, la zafra de reproductores 2024 cierra con un “balance más que positivo. No solo se logró una altísima colocación sino a mejores precios, mostrando un optimismo por parte de los criadores que le permitió a los cabañeros colocar toda su producción. Los números son más que elocuentes y testimoniales”, dijo a Informe Tardáguila Gustavo Basso, principal del escritorio con igual nombre.
Para el director de Juan Vera SRL Negocios Rurales, la zafra de reproductores “se fue afirmando” a medida que fue ganando impulso y con un balance que “superó las expectativas iniciales”. Recordó que en el comienzo (fines de setiembre) estaba la incertidumbre por la sequía que se anunciaban para la primavera y la baja del precio del ganado. “Todos los remates en mi caso estuvieron US$ 200-300 por encima del año pasado y la colocación fue prácticamente total”, resaltó Juan Vera en diálogo con Informe Tardáguila. Acotó que solo una cabaña —que tenía la oferta más abultada (80 toros)— le quedó un remanente sin colocar en día del remate.