Desde Sial París.
El mercado internacional de los lácteos está firme y las perspectivas son alentadoras para el comercio internacional por una simple razón: falta leche en el mundo. Es que la producción en grandes jugadores como la Unión Europea o EEUU no levanta. Además, hay destinos que tradicionalmente en esta época del año solían tener una demanda más deprimida (Brasil por el pico de su producción estacional) que “siguen activos en sus pedidos”, según indicadores operadores del mercado.
De la Sial París participaron Conaprole y Estancias del Lago; ambos contaban con un stand en el pabellón 7 de productos lácteos. Uruguay llegó a esta feria con una posición relativamente cómoda, con ventas ya programadas incluso para el arranque de 2025 y con valores superiores a lo que hoy está mostrando las referencias de Fonterra.
Pero uno de los elementos que causó cierto “asombro” o “desconcierto” fue ver al principal importador de lácteos del mundo (China) ofreciendo para la exportación leche en polvo entera a US$/t 2.500-2.800, un “precio de remate” que está más de US$/t 1.000 por debajo de los valores a los que hoy están exportando Uruguay o Argentina, por ejemplo. “Cuesta creer que estén exportando a esos valores cuando tienen un costo de producción de US$ 0,60 por litro. Hoy el 80% de los tambos de China está perdiendo plata. Eso no es sostenible, pero es lo que hoy estamos viendo”, dijo una fuente a Informe Tardáguila y Valor Agregado de Carve.
Según las fuentes, China ya logró cerrar negocios a destinos como Venezuela o África a esos valores. “Muchos hoy miran eso con desconfianza, porque es un producto sin reputación y hay dudas lógicas sobre su calidad, pero si sostienen esta postura pueden conseguir nichos de mercado”, consideró una de las fuentes.