En la jornada de ayer se reunió el Centro de Coordinación de Emergencias Departamental de Salto (CECOED), con la presencia del Dr. Martín Altuna, director de Sanidad Animal del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) y como único punto del día tratar la situación de la sospecha de Encefalomielitis Equina.

El veterinario informó de la situación a los representantes de las distintas instituciones, tanto a nivel departamental como nacional. A nivel de territorio, de acuerdo con lo informado, se notificaron 10 casos de sospechas de la enfermedad, que incluye a la misma cantidad de animales. Uno de ellos se registra en un equino en la ciudad capital del departamento.

A nivel nacional “hubo casos sospechosos de los cuales algunos se desestiman, sospechas de sintomatología neurológica y que algunos se desestiman de entrada y no requiere ninguna toma de muestra”. En este sentido, los casos notificados de sospecha se dieron en los departamentos de “Florida, Durazno, Tacuarembó y todo el litoral del Río Uruguay, a los que se sumó en las últimas horas San José y Flores”.

La cantidad de sospechas se registraron en “37 establecimientos, que comenzaron allá por el 24 de noviembre y hoy en día aproximadamente la población total es de unos 1.400 equinos y 50 y algo estarían enfermos”. Altuna indicó además que son casos “muy puntuales” de uno o dos animales por establecimiento.

Aún se está trabajando en los distintos laboratorios de los ministerios de Ganadería, Agricultura y Pesca y de Salud Pública, para detectar en primer lugar la presencia del virus y posteriormente la variante de este. En principio, de acuerdo con el diálogo mantenido con el profesional, los primeros resultados estarían siendo negativos a la enfermedad, aunque son varios los casos que aún restan por ser evaluados.

Al ser consultado sobre la presencia de la enfermedad en el país y su posible aparición, o no, de acuerdo con la mayor o menor presencia del vector, es decir de la cantidad de mosquitos, el profesional dijo que “en términos generales, el denominador común es un ambiente donde el vector puede estar presente”. En este sentido mencionó “cursos de agua, inundaciones, vegetación y pasto alto” que brindan una condición de proliferación del vector importante.

El otro “común denominador es que la sintomatología” y en este sentido mencionó que “hay una sintomatología variable, estudiamos todos los epidemiológicos que pasan los técnicos que atienden los casos y pudiera haber una tendencia que fuera una encefalomielitis viral. Pero hasta que no tengamos el diagnóstico cierto, evidentemente no puedo afirmar si la enfermedad está acá”.

Sobre la faltante de vacunas, mencionó que se han realizado varias gestiones a nivel de las empresas y las mismas “estarían llegando la semana que viene, tanto vacunas bivalentes y trivalentes. En la región este hay una escasez importante, por el lado de Argentina, por Brasil y por Uruguay porque lo estamos monitoreando permanentemente”.

Sobre la posible suspensión de actividades de equinos, concentración o movimiento de estos, principalmente desde zonas donde se detecte la enfermedad, Altuna mencionó que “eso está en agenda”. Sin embargo, explicó que, de detectarse la enfermedad, el “equino es una bolsa de saco” en este tema y “no se transmite a otro equino y no transmite a los animales y tampoco un mosquito puede infectarse porque hacen una muy baja viremia”.