La soja termino la semana con bajas próximas al 3% en Chicago como consecuencia del desencanto del mercado con las compras chinas en Estados Unidos y en medio de declaraciones de funcionarios estadounidenses que en su afán por "vender" éxitos expusieron fracasos. La posición julio 2026 cerró a US$/t 416.
Las cifras por sí solas venían reflejando un ritmo de ventas a China no concordante con los objetivos grandilocuentes anunciados por la Casa Blanca tras el cónclave de finales de octubre en Corea del Sur entre los presidentes de EEUU y de China, Donald Trump y Xi Jinping. Pese a eso, los operadores vinieron siendo "amplios" en el sentido de apoyar –vía compra de contratos– más las palabras que los hechos.
Por lo visto la última semana, esa lógica podría haberse roto. Y resulta paradigmático que la mayor contribución al fin de la "era de los crédulos" llegó, también, a través de las palabras de funcionarios de la Administración Trump, que en su afán por "vender" éxitos expusieron fracasos.
El miércoles, el secretario del Tesoro, Scott Bessent, aseguró en un evento del New York Times que China está en vías de cumplir sus compromisos en virtud del acuerdo comercial, incluida la compra de 12 millones de toneladas de soja. Pero ya no habló de fin de año para el cumplimiento de ese objetivo, sino que difirió la fecha límite a finales de febrero. "Diré que China está en vías de cumplir con todos los términos del acuerdo; todos los términos del acuerdo", afirmó el funcionario, con una frase que bien pudo ser un mantra de autoconvencimiento, más que un reflejo de lo que ocurre en el mundo real. Y un día después, el Representante Comercial estadounidense, Jamieson Greer, reflexionó que "probablemente" el comercio entre EEUU y China "debería ser menor para que no dependamos tanto uno del otro".
En adelante, y con el nuevo informe mensual del USDA programado para este martes, sería esperable ver un mercado exclusivamente pendiente de las cifras de ventas a China y no ya en los grandes anuncios que la Administración seguirá haciendo en su propia batalla dialéctica.
Lo que no está claro y será necesario determinar es cuánto de la concreción de las ventas por 12 millones de toneladas ya está incluido en el actual nivel de precios de la soja. Por otro lado, será interesante ver el martes si el USDA sostiene su expectativa de exportaciones por 44,50 millones de toneladas o si la modera un poco más. En la previa de dicho informe, el promedio de las estimaciones privadas auguró el stock final estadounidense en 8,22 millones de toneladas, por encima de los 7,89 millones proyectados por el organismo el mes pasado.
Por otro lado, el maíz tuvo un balance ligeramente bajista para sus precios, pese al buen ritmo que siguen reflejando las exportaciones de EEUU. En tanto que hubo leves altibajos para el trigo, tironeado por una oferta mundial récord y por las renovadas turbulencias en la zona del Mar Negro. El contrato de diciembre del trigo cerró a US$/t 197,5 en Chicago.
Fuente: Granar Research

