Tomando en cuenta la información divulgada la semana pasada por parte de la Dirección de Estadísticas Agropecuarias sobre superficie sembrada con cultivos de verano para la producción de grano seco y la información que manejan los arroceros en cuanto a la superficie ocupada por este cereal, la superficie agrícola para producción de grano este verano suma 1,45 millones de hectáreas, la más extendida desde 2015/16, ocho años atrás.

La superficie total es unas 250 mil hectáreas superior a los pisos alcanzados a fines de la década pasada.

En base a los datos de DIEA, hay un crecimiento en el área de soja —siempre discutida por el sector privado, que opina que es mayor— y, fundamentalmente, de maíz. Se sembraron 213 mil hectáreas con este cereal para la producción de grano seco, un aumento anual de 25 mil hectáreas (13,4%) y la mayor superficie en lo que va del siglo.

El área de soja, luego del desastroso año 2022/23, creció en unas 55 mil hectáreas (5,4%) a 1,064 millones de hectáreas.

Por su parte, los arroceros no lograron completar la intención de siembra este año, que era del orden de las 160 mil hectáreas, en línea con los años anteriores. Finalmente, de acuerdo con datos que se manejan en el sector, se lograron sembrar 148 mil hectáreas con el cereal.