Días atrás el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) declaró la emergencia agropecuaria por déficit hídrico. Debido a la falta de agua, el desarrollo de los cultivos y las pasturas estaba preocupando a los productores, principalmente porque las pocas precipitaciones podían afectar los rindes y la calidad de los granos. Pero la tan deseada lluvia llegó el fin de semana, no fue igual en todo el país, pero llegó, y sirve de respiro. Ahora, en los próximos días deberá verse si el agua que cayó sirvió para algo.
Según destacó el ministro Fernando Mattos, los sectores más castigados por la falta de agua son el agrícola, el granjero y el ganadero. A ellos está dirigida la nueva emergencia agropecuaria, por el que los productores pueden acceder al Fondo Agropecuario de Emergencia.
Este fue “el principal evento de lluvia de los últimos meses”, destacó el meteorólogo Mario Bidegain en su cuenta de Twitter. Para esta semana, el Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet) pronosticó probabilidades medias de lluvia para el miércoles 26, para el suroeste, el centro y el este del país. Para los demás días de la semana no pronosticó precipitaciones.
Los productores están atentos a los pronósticos que presentan un nuevo año Niña, que nuevamente traería sequía en los próximos meses.
