Para el director del Observatorio de la Coyuntura Económica de la UCU, Javier de Haedo, un más que factible triunfo de Sergio Massa en el balotaje con Javier Milei en Argentina no será una buena noticia para los intereses de Uruguay. “No vamos a tener en un gobierno de Massa un aliado para la estrategia de inserción internacional que promueve Lacalle Pou”, consideró el analista. El economista brindó este lunes un taller de economía para periodistas donde abordó diferentes temas de la coyuntura local y regional. De Haedo citó el discurso que brindó al actual ministro de Economía argentino tras su triunfo en las elecciones del pasado domingo, donde predominó un tono fuertemente proteccionista de la producción argentina.

El economista añadió que, si bien Uruguay logró “destetarse” de Argentina en su sistema financiero, la brecha cambiaria que existe con el país vecino llevará que se mantenga “un desvío” del consumo de los uruguayos del otro lado del Río de la Plata. Explicó que eso es lo único que puede explicar que el consumo de los uruguayos haya crecido a una tasa real del 4,5% interanual en el segundo trimestre, mientras que la recaudación de IVA de la DGI bajó 1,8% real en igual período.

De Haedo consideró que un eventual triunfo de Massa hace pensar que la brecha cambiaria se mantenga por un buen tiempo, aunque es un “bomba de tiempo” que puede explotar en cualquier momento. “Pasaron a segunda vuelta el que derrama combustible (Massa por la emisión de pesos) y el que juega con el fósforo (Milei por su plan de dolarización)”, graficó.

A su juicio, no tendría sentido que Massa cambie su estrategia de pisar el tipo de cambio oficial hasta el balotaje. “Equipo que gana no se toca. El escenario más probable es que gane Massa (…) tendríamos más de lo mismo. Si viene (Roberto) Lavagna (como futuro ministro de Economía) seguramente ponga la cosa en orden con cierta gradualidad. No me imagino shocks ni el fin de los cepos. Si gana Milei, no va a ser el de la primera vuelta porque tendrá que acordar con otros grupos políticos”, afirmó.

“En cualquier escenario, Argentina va a estar peor que antes. Va a seguir pobre y barata por un buen tiempo. Vamos a tener que seguir con el cinturón ajustado porque vamos a seguir en zona de turbulencias”, advirtió.

De Haedo proyecto un tipo de cambio oficial en Argentina a A$ 530 para fin de año (hoy está en A$ 350) con una inflación del 181% en 2023. En tanto, para 2024 espera que la inflación escale al 250% anual, con un dólar oficial que cerraría el promedio de diciembre en A$ 2.385.

El economista indicó que el PIB per cápita de Argentina está hoy en los niveles de 2007, lo que explica los actuales niveles de pobreza (superior al 40%) que tiene el vecino país. La economía argentina caería 2,8% este año y 1% en 2024.