Los precios mundiales de los alimentos han caído por décimo mes consecutivo, ya que el aumento de las exportaciones de trigo de Rusia y Australia alivió las presiones inflacionarias, dijo la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). El índice de precios de la entidad se situó en 131,2 puntos en enero, 1,1 puntos (0,8%) menos que en diciembre. En comparación con marzo de 2022, cuando el índice alcanzó un máximo histórico de 159,7 puntos tras la invasión de Ucrania por Rusia, hubo una caída de 28,6 puntos (17,9%).
El índice de precios de la carne de la FAO se situó en enero en un promedio de 113,6 puntos, lo que supone una ligera disminución (de 0,1 puntos y un 0,1%) respecto de diciembre, con lo que continuó su descenso por séptimo mes consecutivo, pero aun así se mantuvo 1,5 puntos (un 1,3%) por encima de su nivel de hace un año.
La bajada de los precios mundiales de las carnes de aves de corral, bovina y cerdo explica el descenso del índice en enero. Los precios mundiales de la carne de aves de corral siguieron disminuyendo debido a que las disponibilidades exportables a escala mundial procedentes de los principales proveedores siguieron siendo superiores a la demanda de importaciones, pese a los brotes generalizados de gripe aviar.
Por otra parte, los precios de la carne de cerdo disminuyeron ligeramente a causa de la abundante oferta de cerdos de matanza, especialmente en el Brasil y en los Estados Unidos de América, y debido a que las importaciones de China previas a la Fiesta de la Primavera fueron menores de lo previsto. Del mismo modo, descendieron los precios internacionales de la carne vacuna, a raíz del aumento de la oferta de ganado listo para faena, principalmente en Oceanía. Por el contrario, los precios de la carne ovina subieron a causa del aumento de la demanda de importaciones, a pesar del incremento de los volúmenes de matanza en Australia.