A la falta de un día hábil para el cierre de la operativa cambiaria de setiembre, el dólar insinúa un cambio de tendencia y en la variación punta a punta del mes avanza 3% (alrededor de $ 1). Entre miércoles y jueves, el tipo de cambio avanzó casi 50 centésimos con un promedio interbancario a $ 38,75. En el acumulado del año, el dólar todavía está 3,3% por debajo de la última operación del año pasado, pero el leve repunte que mostró en agosto (+0,4%) y lo que va de setiembre pueden estar pautando un cambio de tendencia en la cotización de la moneda estadounidense, clave para la ecuación económica de varios rubros de la producción agropecuaria y agroindustrial, en un contexto de menores precios de commodities a nivel internacional.

A nivel global, el índice dólar (que se calcula en base la cotización de cinco monedas relevantes) bajó este jueves desde un máximo de 10 meses, pero se mantuvo en camino de registrar ganancias semanales, y los inversores se mantuvieron en guardia ante una posible intervención en el yen, que se mantiene cerca de mínimos de 11 meses frente a la moneda estadounidense, según Reuters.

El dólar se ha disparado ante las expectativas de que la economía estadounidense seguirá siendo más resistente a las tasas de interés más altas que otras economías, después de que la Reserva Federal advirtiera la semana pasada que podría aumentar aún más las tasas y que probablemente las mantendrá altas por más tiempo.

"En este entorno, el dólar se está beneficiando tanto de mayores rendimientos como de un sentimiento de riesgo más nervioso", dijo Vassili Serebriakov, estratega cambiario de UBS en Nueva York. Los rendimientos de referencia de Estados Unidos a 10 años alcanzaron el 4,688% este jueves, su nivel más alto desde 2007.