Los principales indicadores de la economía mundial tendieron al alza ayer luego de que China anunciara un recorte a la mitad en los aranceles impuestos a productos de importación de Estados Unidos.

La decisión tiene en cuenta, por un lado, el acuerdo de Fase 1 al que llegaron ambas potencias a mediados de enero y, por otro lado, intenta favorecer la reactivación de la economía del país asiático, amenazada por el coronavirus que ya causó la muerte de más de 500 personas —la amplia mayoría en la ciudad de Wuhan y aledaños— e infectó a más de 28 mil.

El Ministerio de Finanzas de China dijo que algunas tarifas se reducirían de 5% a 2,5% y otras de 10% a 5%, en ambos casos a partir del próximo 14 de febrero. Abarca 1.717 productos importados desde Estados Unidos.

El mismo día, Washington recortará de 15% a 7,5% los aranceles a productos chinos impuestos el pasado mes de setiembre, cuando la escalada de la guerra comercial.

El acuerdo de Fase 1 al que llegaron las dos principales potencias mundiales en enero era considerado muy ambicioso por el desafío que implicaba para China aumentar en US$ 200 mil millones sus importaciones desde Estados Unidos en dos años. Luego del coronavirus y el enfriamiento de su economía —se estima que el consumo de petróleo se redujo 25% el mes pasado en China— el desafío es aún mayor. La reducción de aranceles es una señal de China en el sentido de, más allá de lograr la meta o no, se está haciendo el intento.

Los principales índices bursátiles de Asia subieron en el entorno de 2% desde los pisos alcanzados por los temores del impacto del coronavirus. La moneda china también se recuperó, con el dólar volviendo a cotizar por debajo de 7 yuanes.