El marco de la Misión del Artículo IV, la delegación de técnicos del FMI que visitó Uruguay elogió el manejo económico y monetario que viene realizando el económico del presidente Luis Lacalle Pou.
“El sólido historial de las autoridades en la implementación de políticas macroeconómicas acertadas en un entorno desafiante ha mejorado la resiliencia del país ante los shocks”, resaltó.
“La inflación alcanzó un máximo del 9,95 % en septiembre de 2022 y ha disminuido al 7,5 % en febrero de 2023. El aumento de la inflación fue menos pronunciado que en otros países debido a una fuerte respuesta de la política monetaria”, destacó el comunicado del FMI.
En respuesta al aumento de las presiones inflacionarias, el Banco Central del Uruguay (BCU) “endureció adecuadamente la política monetaria durante 2022, mientras que el peso se apreció”, indicó el organismo multilateral. Así, el BCU elevó marcadamente la tasa de política desde 5,75% en diciembre de 2021 a 11,5% en diciembre de 2022, tornando la postura de la política monetaria contractiva. El techo del rango del rango inflacionario se redujo del 7% al 6% a partir de septiembre de 2022.
“Las expectativas de inflación se mantuvieron fuera de la banda objetivo en 2022, pero han disminuido recientemente, en particular las expectativas a dos años”, valoró. El peso se apreció un 13% frente al dólar estadounidense en términos nominales y un 20% en términos efectivos reales en 2022, “impulsado por diferenciales de tasas de interés, términos de intercambio favorables y una mayor liquidez en dólares estadounidenses. “Para respaldar su mejora general del marco de política monetaria, el BCU no ha intervenido en el mercado cambiario”, señaló el FMI.
“La postura actual de la política monetaria es adecuada. El BCU deberá mantener la actual postura contractiva hasta que la inflación y las expectativas de inflación hayan convergido dentro del rango meta de manera sostenida, lo que será crucial para seguir construyendo credibilidad en la política monetaria y apoyar los esfuerzos de desdolarización”, consideró el organismo en su evaluación. Se proyecta que la inflación en Uruguay disminuya a 7% en 2023 y se sitúe dentro del rango meta (3% a 6%) en 2024.
Este martes, el dólar cayó por tercera jornada consecutiva en Uruguay y perdió 73 centésimos desde su máximo de $ 39,68 que alcanzó en marzo el pasado jueves 16. En la jornada de ayer, el promedio mayorista bajó 0,64% en promedio y quedó $ 38,94. En el promedio mensual de marzo, está todavía un 0,6% por encimad de febrero.
Por otro lado, el FMI espera que la economía uruguaya crezca 2% en 2023 “en medio de una gran incertidumbre debido al impacto de la sequía actual. A pesar de los obstáculos externos, las condiciones financieras más estrictas y el impacto de la sequía, el crecimiento se vería respaldado por una fuerte temporada de turismo, una mayor producción y exportación de celulosa y un consumo privado sólido a medida que se recuperan los salarios reales”.
