Moody's Investors Service recortó su perspectiva para los bonos soberanos chinos a negativa, subrayando la creciente preocupación global sobre el nivel de deuda en la segunda economía más grande del mundo, informó Bloomberg.
Moody's redujo su perspectiva a negativa desde estable, manteniendo al mismo tiempo una calificación a largo plazo de A1 para los bonos soberanos del país, según un comunicado. El uso de estímulo fiscal por parte de China para apoyar a los gobiernos locales y su creciente crisis inmobiliaria está planteando riesgos para la economía del país, dijo la calificadora.
El gobierno retrocedió poco después de que se anunciara el cambio de perspectiva, diciendo que estaba "decepcionado" con la decisión de Moody’s y que la economía del país "será muy resistente y tendrá un gran potencial". El impacto de la crisis inmobiliaria está bajo control, dijo el Ministerio de Finanzas en un comunicado.
El yuan experimentó pocos cambios en el comercio interno y externo, mientras que el rendimiento de los bonos gubernamentales a 10 años de China se mantuvo estable en 2,68%. El índice MSCI China cayó 1,7%, camino de su cierre más bajo desde noviembre de 2022. El indicador mantuvo la mayor parte de sus pérdidas después de la decisión de Moody's.
Bloomberg informó que los grandes bancos estatales de China vendieron grandes cantidades de dólares frente al yuan en el mercado interno después de la medida de Moody's, lo que ayudó a un repunte de la moneda china.
