En Nueva Zelanda algunos procesadores de madera serán aprobados para reanudar operaciones, de forma limitada, esta semana a fin de garantizar el suministro de productos clave.
El brazo forestal del Ministerio de Industrias Primarias, Te Uru Rakau, supervisará un aumento gradual de la actividad de los aserraderos que producen bienes esenciales como madera para pallets y cajas. La cosecha no se reanudará y las industrias serán abastecidas con troncos que ya están en las reservas forestales.
Además, a los fabricantes de tableros de fibra y otros productos de madera de ingeniería se les permitirá reiniciar de forma limitada para usar productos perecederos como la resina que, de otro modo, destruiría la maquinaria en la que se ha dejado o se debería tirar, creando problemas ambientales.
El ministro de silvicultura, Shane Jones, dijo que el gobierno siempre ha estado dispuesto a adoptar un enfoque pragmático para hacer frente a situaciones potencialmente anómalas que surgen durante el encierro de covid-19. Al hacerlo, tenía que gestionar tanto los riesgos para la salud como los posibles riesgos económicos del cierre, el último de los cuales podría tener implicaciones sistémicas y de larga duración si no se aborda con cuidado. "Hay muchas expectativas en el sector forestal de que podrán cumplir con los estándares que se les han exigido", dijo Jones a BusinessDesk. No se espera una mayor ampliación del procesamiento antes de que el gobierno tome decisiones la próxima semana. Todas las cosechas forestales del país se detuvieron el mes pasado cuando el gobierno trabajó para maximizar la cantidad de personas que permanecían en sus hogares para suprimir el brote de covid-19 aquí.
Los aserraderos se cerraron en todo el país y solo las plantas que fabricaban envases y pallets para alimentos esenciales, exportaciones y suministros médicos podían continuar operando.
Fuente: Friday offcuts