El mercado forestal internacional para Uruguay sigue presentando grandes desafíos, más que nada en términos logísticos, con una situación de hiper inflación en los precios y una escaza disponibilidad de contenedores y barcos para mover la mercadería.
A esto hay que agregarle la posibilidad de que, una vez arribado el barco a China, puede permanecer cargado hasta 15 días en el agua debido a las demoras que se están generando in situ, costo que se debe hacer cargo el exportador, ya que los chinos no asumen ninguna parte.
Consultado por el mercado de chips, un operador local dijo a Panorama Forestal que “se sigue cumpliendo con los contratos acordados el año pasado” y que “fueron muy pocos los barcos spot que se han cerrado; hace poco se concretó un barco a Europa, pero fuera de esto la actividad continúa con un ritmo normal”.
Por su parte, otro operador dijo que “el mercado internacional sigue demandante y puja por los productos, pero el set de problemas logísticos le está aportando mucho riesgo al negocio y esto dificulta concretar nuevos acuerdos”.
Teniendo en cuenta las restricciones energéticas en China y la llegada del año nuevo, es previsible que se registre una caída en la actividad, algo que se está percibiendo en el ánimo de los exportadores, pero que aun no se ha concretado.