Los meses de verano son en los que el Índice de Riesgo de Incendio Forestal (IRIF) es mayor ya que aumenta la temperatura promedio, disminuye la humedad y se generan condiciones más adecuadas para la propagación del fuego.
Como es costumbre, la Sociedad de Productores Forestales lleva a cabo un plan de protección de incendios para contrarrestar los posibles focos, pero más que nada para prevenir su ocurrencia.
Consultado por Panorama Forestal, Rafael Sosa, coordinador del plan, dijo que” hemos tenido sobre todo al sur del Rio Negro, un verano más cálido, y por tanto con mayor Índice de Riesgo de Incendio Forestal (IRIF) que el año pasado.
Esto se ha reflejado en un incremento de 50% en las horas voladas para detección, y también un incremento similar en la cantidad de focos observados”.
Muchas veces los focos surgen de quemas de campo, no alcanzando el grado de amenaza a plantaciones. Los despachos de las Brigadas Helitransportadas para combate, si bien han sido el doble que el año pasado, están 40% por debajo del promedio de los últimos seis años, aclaró Sosa.
Por otra parte, el coordinador del Plan de Protección Contra incendios destacó las medidas silviculturales preventivas que se toman en los bosques implantados (existen cortafuegos que se mantienen limpios, equipos de combate, personal entrenado, suspensión de algunas actividades cuando el riesgo es muy alto o extremo, etc.) que hacen que los incendios sean menos frecuentes, y generalmente de menor magnitud que los que se dan en las zonas de interface.
Este año las hectáreas comprendidas en este plan son 801.063, 3% más que el año anterior.