Desde hace más de una decada el hijo pródigo de la forestación uruguaya, el Eucalyptus globulus, es afectado por una enfermedad fúngica que afecta el crecimiento de los árboles, reduciendo de forma considerable el rendimiento a cosecha.

Esta enfermedad, originaria de Australia y cuyo agente causal es el hongo Teratosphaeria nubilosa, puede llegar a causar una pérdida de hasta 50% de rendimiento e, incluso, en casos de ataques muy severos, la muerte de los ejemplares. 

En los últimos años se acrecentó la utilización de una nueva especie de Eucalyptus; E.smithii. Hoy en día se podría decir que esta especie es la sucesora del E.globulus, ya que, a pesar de tener un calidad pulpable apenas inferior, el crecimiento que ha presentado en Uruguay es mayor al del E.globulus y al de las otras especies presentes en el país.

Por este motivo, su uso ha crecido exponencialmente y hoy en día es un jugador importante, que debe ser tenido en cuenta a la hora de plantar.