A pesar de que en febrero hubo un aumento en el peso medio de las carcasas comparado con el mes anterior, respecto a febrero del año pasado se constata una caída significativa que, en el caso de los novillos, es de 11 kilos a 273,7 kilos.

Por lo tanto, la producción de carne aumenta en proporciones algo menores a la faena.

El crecimiento en la comparación mensual, de algo más de 2 kilos para los novillos, seguramente es consecuencia de un mayor peso relativo de animales que salen de los corrales (para participar de la cuota europea 481) y también por la mejora de las condiciones forrajeras tras las lluvias que comenzaron a registrarse a partir de mediados de enero, que dejaron atrás el período de sequía.

En los últimos 12 meses el peso promedio de las carcasas de novillos fue de 275 kilos, manteniendo una sostenida caída desde el pico de 284 kilos en los 12 meses a mayo de 2021. El descenso se da por los atractivos precios que ofrece la industria, que llevan a los productores a tomar la decisión de adelantar las ventas y comprar reposición a valores que no subieron en la misma proporción que los del gordo.