La primavera y el verano son los momentos cuando “el retorno económico de la suplementación animal es positivo”, dijo el Dr. Rafael Carriquiry, técnico del Instituto Plan Agropecuario. Explico que “los minerales son de los nutrientes esenciales en la dieta de los animales” y en este sentido indicó que “se dan circunstancias en las que la cantidad de minerales que consumen no es suficiente, por lo tanto es necesario suplementarlo”.

El profesional mencionó que estas deficiencias minerales se expresan cuando “los animales tienen alta demanda”, al mismo tiempo remarcó que “el retorno económico de la suplementación animal es positivo cuando están cubiertos los requerimientos de proteína y energía, y esto se da en la primavera y en el verano principalmente”.

Manifestó que la suplementación mineral durante el invierno, “si bien es una necesidad biológica, no tiene retorno económico”. Explicó que la suplementación mineral en dicha época del año, “cuando el animal no tiene cubierto sus requerimientos de energía o de proteína” el retorno económico es “muy bajo o nulo”.

 

Principales minerales

En cuanto a los principales minerales, Carriquiry los dividió en dos grandes grupos, “los macro y micro minerales”, explicó que los primeros “son los que el animal tiene que consumir todos los días varios gramos y los micro minerales tiene que consumir miligramos”.

En los macro minerales señaló “el fósforo, el calcio, el sodio y el potasio”. Indicó que “con frecuencia, los niveles de sodio y fósforo que consumen los animales son insuficientes”. En este punto señaló que “los macro minerales como el fósforo y sodio no se pueden suplementar por vía inyectable tienen que suplementarse por vía oral, en las sales o bloques minerales”.

Explicó que “la cantidad de fósforo que requiere una vaca, todos los días, se ubica entre 15 y 20 gramos, según su estado, su tamaño, si está dando leche o no y con un inyectable de fósforo nosotros le damos un gramo o dos. En un inyectable la damos 100 centímetros y quizás le damos diez gramos de fósforo, pero ella necesita todos los días esos 10 gramos por eso no tiene sentido utilizar los inyectables de fósforo para suplementar este mineral”.

Situación diferente es la de los micros minerales. En este sentido dijo “nos consta que el cobre, zinc y selenio son minerales que con frecuencia aparecen en niveles insuficientes en las dietas de los rumiantes a pastoreo”. En este casi mencionó que “estos minerales se pueden suplementar mediante inyectables”.

El profesional recomendó la realización de análisis de sangre del rodeo, de manera de identificar “algunas de las carencias más importantes que pueden presentarse en nuestro establecimiento”. Explicó que la técnica “no es muy costosa y que está disponible, con una cantidad de 20 muestras de sangre de los animales nos puede representar lo que está pasando a nivel de un rodeo grande de animales de una manera aceptable”.