La violenta suba de precios de la hacienda vacuna de las últimas semanas, que puso al novillo argentino a la cabeza de los de la región y solo por detrás de los de Estados Unidos y la UE, evaporó la competitividad de los frigoríficos. “Los precios no cierran”, sintetizaron en una empresa. “No estamos ofertando hasta que los negocios se reacomoden”, comentaron en otra.

De acuerdo con fuentes de Faxcarne, las mayores empresas han restringido alrededor de entre 20% y 30% sus faenas a raíz de la suba de la hacienda, dependiendo de sus situaciones particulares respecto de las compras y ventas que ya habían hecho, la situación de los trabajadores y otras cuestiones.

En una planta de Santa Fe, que la semana pasada había reducido la faena, para la corriente decidió faenar solo de lunes a miércoles. En otra empresa con dos plantas, la semana pasada faenaron a poco más del 70% de capacidad y para esta semana planeaban bajar al 55%. Otro tanto se registró en otra empresa grande, que la semana pasada redujo la matanza al 50% y esta iba a faenar solo 3 días.