Los precios de las categorías de reposición y cría sufrieron una fuerte y lógica corrección a la baja en las subastas por pantalla de esta semana, impactados por los dos factores que más pesan en su formación: el clima y el precio del gordo. El ajuste seguramente todavía no se completó.
Las condiciones hídricas en la mitad sur del país se están complicando día a día y los pronósticos no son muy alentadores, más allá de que hay previstas algunas precipitaciones para el jueves de la semana próxima. Además, el hecho de que se transite —nuevamente— por un año Niña hasta fin de año, que implica mayores probabilidades de lluvias por debajo de lo normal, generan preocupación adicional.
Más allá de esto, la corrección a la baja en los precios del gordo fue muy drástica y todavía no se puede hablar de que se esté encontrando un nuevo equilibrio en el mercado. La caída libre de las semanas anteriores quedó atrás, pero la tendencia a la baja se mantiene, con plantas que a esta altura de la semana manejan referencias de precios unos 10 centavos por debajo de la pasada, en el entorno de US$ 3,70-3,80 el kilo carcasa de novillos.
En base a esto, era previsible una importante corrección a la baja en los precios de la reposición; de lo contrario, la relación flaco/gordo se ubicaría en niveles históricamente altos y, más allá de que las previsiones de mercado en el mediano plazo continúan siendo auspiciosas, no hay factores que permitan sostener una relación de 1,4, es decir, 40% más caro el kilo de ternero que el del gordo.
Lo lógico sería pensar en una relación de reposición de 1,15-1,20. Si el precio del novillo gordo se estabiliza cerca de las referencias actuales (US$ 3,60-3,70, por ejemplo), implicaría un precio para el ternero en el entorno de US$ 2,25 el kilo. En las pantallas de esta semana promedió unos 20 centavos por encima de ese valor. Por lo tanto, le quedaría parte del camino a la baja todavía por recorrer.
Pero, a su vez, podría empezar a terciar la exportación en pie, dado que el negocio con Turquía a estos niveles de precios podría volver a ser atractivo en momentos en que el país euroasiático anunció un aumento de las compras de vacunos en pie. De esta manera, la exportación en pie actuaría como la válvula de escape que le permita al sector criador mantener un precio de venta de su producción en niveles más atractivos.
Pero son muchas suposiciones en momentos de gran incertidumbre. Habrá que esperar a que escampe para tener una noción más certera acerca de en qué niveles de precios el mercado puede nuevamente empezar a hacer pie.