La seca reinante en el país está generando pérdidas millonarias en todos los sectores productivos y en el caso de la ganadería, un negocio más a largo plazo, el mayor impacto es en la producción de terneros que incidirá en los números económicos de los próximos tres años. En este sentido, varios veterinarios consultados han señalado que los ganados que se trabajaron de forma temprana, al inicio del período reproductivo, lograron preñarse en un porcentaje mayor que los que comenzaron sobre el final de la primavera y en el verano.
El Dr. Sergio Kmaid, integrante de Laboratorio Universal, trabaja hace muchos años en el área reproductiva vacuna y en diálogo con Cambio, señaló que existen trabajos de inseminación artificial a tiempo fijo en vacunos que no lograron superar el 35% de éxito, cuando en un año normal se logra el 50% de preñez.
Kmaid señaló que es “un año particular, que está siendo duro” en el área reproductiva y en este sentido explicó que “la gente que se movió rápido se movió temprano, tuvo buenos resultados, sobre todo hablando de las inseminaciones y las inseminaciones a tiempo fijo, y entiendo que en muchos lugares las tasas de preñez fueron buenas”. Respecto a quienes comenzaron con los trabajos avanzado el período reproductivo, dijo que “los resultados de preñez van a ser bajos”.
Analizando la actual situación y los posibles resultados productivos, el profesional indicó que “algunos datos de inseminaciones a tiempo fijo, sobre todo en el norte, particularmente unos datos de Artigas —donde el ganado ha perdido mucha condición corporal en muy poco tiempo— ha habido resultados de preñez a tiempo fijo muy malos, tal vez no superando el 35%”.
Explicó que “la vaca con cría, que razonablemente en un año normal tienen una tasa de preñez en tiempo fijo que oscila en el 50%, perdieron por lo menos un punto de condición corporal, y eso son no menos de 50 kilos y eso para una vaca que está todavía dándole leche a su ternero, realmente es como la tormenta perfecta. Entonces, a pesar de haberse inseminado bien, lamentablemente las preñeces han sido bajas”.
Dada esta situación en las inseminaciones, Kmaid indicó que en los “va a estar complicado porque el ganado ha dejado de ciclar y es muy difícil mantener la condición corporal con los campos como están en la situación actual”.
Desde su punto de vista “los ganados solteros, tanto alguna vaca fallada como en las vaquillonas, si se trabajaron temprano van a andar bien. El problema que a veces, sobre todo en el norte del Uruguay, las vaquillonas se aprontan más tarde porque los campo muchas veces vienen más tarde y en esa espera y en ese que voy, que no voy, qué hago o qué no hago. Podemos correr un cierto riesgo y van a ver resultados muy desparejos”.
En el último taller de diagnósticos de gestación vacuna, realizado en INIA el año pasado, los datos de preñez terminaron sorprendiendo, debido a que los profesionales esperaban un menor resultado al obtenido, partiendo de una situación climática complicada. La respuesta en ese momento, fue el resultado de un entore tardío, por lo que este año hubo mucha cola de parición en los rodeos. Justamente esa cola de parición es la que tuvo el ternero en plena seca y esa es la categoría que “las tasas de preñez van a ser bajas o muy bajas en algunos casos”, dijo el veterinario.