Por Facundo De Acebedo, desde París.
La escasa presencia de importadores chinos en la feria del Sial en París, celebrada esta semana, reflejó el pesimismo sobre una posible recuperación del mercado para la carne vacuna. Las expectativas de la mayoría de los expositores de cara a la Sial eran moderadas y no se equivocaron. La llamita de esperanza radicaba en que se trataba de la primera feria post pandemia de concurrencia masiva, pero ello no fue suficiente para revertir la situación.
China actualmente está importando mucho volumen desde Brasil, quien acepta precios más bajos, y esto está generando que se siga acumulando stock en el gigante asiático dado el bajo nivel de consumo. Es mucho lo que Brasil está exportando para lo que es la actual situación de consumo. Entre agosto y setiembre embarcó a China más de 260 mil toneladas de carne vacuna, volumen que está llegando en estas semanas.
Por más que Brasil acepta precios más bajos, algunas plantas de este país que participaron en la Sial consideraron como “muy bajo” el nivel de US$ 4.500 por tonelada que pasaron algunos importadores chinos para cerrar negocios por delantero. Un exportador dijo que por menos de US$ 5.000 no estaba dispuesto a vender ese set de cortes. En el pico de precios este set de cortes los exportadores brasileños lo vendían a más de US$ 7.000. Un de las fuentes consideró que, si esta tendencia se sostiene, en unas semanas el mercado de exportación estará a la par del abasto brasileño.
Es una señal en cuanto a que se puede estar marcando un piso en la espiral bajista de los precios.
En Europa la situación no es nada mejor. Se avecina un invierno duro, con altísimos costos de la energía e inflación. Los preciso de importación se desplomaron en las últimas semanas. A pesar de que la producción doméstica de carne vacuna se pronostica en caída, la expectativa es que la demanda se posicione por debajo.
El escenario luce mucho más complicado del que se podía prever un par de meses atrás. A mediados de este año, tras haber alcanzado los precios de la hacienda más altos de la historia, la expectativa era de una corrección del mercado, pero nada hacía prever que tuviese la magnitud de lo que se dio en las últimas semanas, así como anteriormente tampoco se podían prever los máximos alcanzados en el primer semestre.
Teniendo en cuenta las previsiones de demanda internacional para el año próximo, parece claro que las referencias alcanzadas en el primer semestre no se volverán a dar en un mediano plazo. Las previsiones, teniendo en cuenta que los precios de los granos siguen siendo altos, indicarían que la proteína animal debería mantenerse con cotizaciones atractivas. Pero, como siempre, dependerá de dónde se posicione la demanda.