El Ing. Agr. Carlos Molina, quien coordina y analiza las Carpetas Verdes en el Instituto Plan Agropecuario, brindó una charla en el marco del 105 Congreso Anual de la Federación Rural en Tacuarembó donde subrayó el fuerte incremento de los precios de los productos agropecuarios, así como también al aumento de los insumos y la baja del dólar, y estimó que el cierre de las carpetas al final de junio arrojará el mejor resultado de los últimos 20 años en moneda corriente.

“Las características del escenario 2021-22 es que es redondo desde el punto de vista de los precios, precios de la hacienda vacuna, tanto de la reposición como sobre todo del gordo, que son los más altos en moneda corriente desde que hay registros y que también son precios altos en moneda constante”, dijo Molina.

Respecto al incremento de los precios, el profesional marcó que son “realmente inéditos” y en este sentido marcó un incremento anual del “40% en promedio del gordo y casi 30% para cualquier categoría de reposición”. Agregó que si se cerrara el ejercicio en este momento, “la diferencia de precios de inventario entre inicio y fin del ejercicio, el ganado en cualquier categoría, vale entre 35% y 40% más que el año pasado”.

En contrapartida al excelente escenario de precios, existen algunos puntos que impactan negativamente en los ingresos. “Nosotros decimos que en la fiesta de precios de la hacienda se cuelan los precios de los insumos” dijo Molina, quien agregó que “prácticamente todos cotizan al alza, hay una inflación en los precios de todos los insumos, de los componentes de pasturas, combustible, reparaciones, mantenimiento, servicios, ración, salarios, todos los componentes del costo de producción también se incrementan”.

De acuerdo con las simulaciones que se realizaron para la presentación en el Congreso, los costos estarían creciendo “posiblemente” entre “un 15% y 25%, cosa que es inédita de un ejercicio a otro”.

A pesar de este incremento de los costos de producción, Molina indicó que “los ingresos de las empresas serían los mejores de los últimos 20 años”. El técnico del Plan Agropecuario dijo que “después de pagar todas las cuentas, posiblemente los ingresos andarían entre 20% y 30% por arriba en moneda corriente respecto al año pasado y en algunos casos hasta capaz que 40%”.

Molina indicó que este tipo de incrementos en los ingresos de las empresas, “ya sucedió, no es inédito”, y recordó que “ya sucedió en el ejercicio 2010-2011, siempre hablando de las empresas que nosotros tenemos información, y no tan lejos en el ejercicio 2018-2019 cuando el ingreso creció entre 50% y 70% de un año a otro”.

En moneda constante también se da un incremento importante para las empresas; sin embargo “el comportamiento del dólar y la inflación” impactan negativamente y los aumentos serían inferiores al análisis en moneda corriente. “Todos sabemos que el dólar no viene acompañando, no está jugando con la camiseta de los productores”, dijo Molina quien indicó que “el dólar en este ejercicio está perdiendo valor frente al peso en el entorno del 6,5 a 7% y la inflación está en el entorno de 8% a 9%, eso hace perder ingreso real”.

El aumento de los ingresos en moneda constante esperado por el Plan Agropecuario estaría ubicado entre el 15% y 20%.

El evento niña

El integrante del Plan Agropecuario expresó que debido a la buena demanda en este ejercicio se comercializaron “muchos ganados que normalmente no se venderían”, haciendo referencia a lotes que se comercializaron a pesar de no estar totalmente terminados, además del movimiento de ventas en la reposición debido al evento de La Niña.

“El precio no nos puede hacer olvidar del evento Niña que afectó a muchos productores y que en algunos lugares es la tercer primavera perdida, con todo lo que implica en la producción de pasturas proveniente fundamentalmente el campo natural”, dijo el profesional.

En este sentido dijo que los buenos resultados son la base “para aprovechar con prudencia y cautela, para fortalecer las empresas, generar empresas con mayor capacidad de adaptación, resolver problemas de infraestructura, subdivisiones, aguada, mejoramientos de campo,  para poder generar empresas con capacidad de adaptación para enfrentar situaciones adversas y ser más eficiente en los procesos productivos”.

Molina indicó que “la cautela y la prudencia” van de la mano de “consolidar la caja” ya que se han comercializado ganados que no estaban previstos vender. “El tema financiero es fundamental porque si yo vendí animales que no tenía previsto vender en este ejercicio todavía, porque los precios serán buenos, porque la seca me estaba apretando y tenía que ajustar la carga y había mercado, si hay, hay guardar para cuando no hay, como decía mi abuela” acotó.

El profesional remarcó que “consolidar las empresas y generar esa capacidad de adaptación, no solo tiene que ver con lo productivo, sino que tiene que ver con la solidez financiera de la empresa y la información, las empresas que capitalizan mejor estos eventos favorables de precios, de mercado y que enfrentan mejor eventos desfavorables de precios, de mercados y de clima son aquellas empresas que tienen información objetiva para poder decidir”.