En un programa de televisión llamado De Frente com o Touro emitido sobre fines de julio pasado, el CEO de Minerva, Fernando Galletti de Queiroz, dijo que las guías en las que se basó la creación de la empresa Minerva a principios de los años de 1990 fueron tres: el control de los costos para ser competitivos, logística y canales de distribución diversificados e inteligencia de mercado y gestión del riesgo. Consideró que el comercio de Commodities debe basarse en esos tres pilares y fue desde allí que cimentó el crecimiento de la empresa hasta ser la principal exportadora de carne vacuna de América del Sur y a ser, si se aprueba la transacción dada a conocer esta semana, la principal empresa del rubro cárnico en Uruguay.
La compra de 16 plantas a Marfrig va en el camino de consolidar a Minerva como exportadora del commodity carne vacuna. Minerva no se muestra interesada en productos con valor agregado, eso fue con lo que se quedó Marfrig. Su sesgo es competir a bajos costos, accediendo a los mercados con precios lo más competitivos que se pueda.
Eso también se advierte en la estructura de compras de Minerva, con un peso relativo mayor de vacas en el total de su faena, en desmedro de los novillos. La faena de Minerva en 2022 incluyó 44% de vacas y 42% de novillos, cuando en el global del país se faenaron 35% de vacas y 50% novillos. A su vez, si se la compara con las otras principales empresas del país, la diferencia en la composición de la faena es mayor aún. En Marfrig el 52% de los animales faenados en 2022 eran novillos y 37% vacas, en tanto que en las otras tres principales (Las Piedras, Pando y BPU) la proporción de novillos es mucho mayor (70%) y solo 17% de vacas.
La menor participación de novillos en su estructura de faena implica una menor participación de animales de corral. De hecho, contrariamente a varios de sus competidores, Minerva no cuenta con corrales de engorde propios, aunque sí realiza convenios con corrales que les proveen animales terminados a grano.
Con la compra de BPU, que en el día de hoy pasó a ser administrado por Minerva, la multinacional brasileña adquirió una porción más grande de negocios de carne de corral. A los feedloteros que trabajan con BPU hace años Minerva les dio la tranquilidad de que el sesgo del negocio no cambiará y que los animales terminados a grano seguirán formando parte de las compras y del negocio de Minerva en BPU.
Habrá que ver qué pasará si se concreta el traspaso de las tres plantas de Marfrig a Minerva, pero parece claro que el foco de la comercialización de carne de mayor valor quedará en manos de las demás industrias y que el de Minerva, tal como lo dijo su CEO, será el de competir a bajo costo.