Según un estudio publicado por el Instituto Plan Agropecuario, en base a su encuesta denominada RING, únicamente el 25% de los productores reportan una altura del pasto promedio en el campo natural de más de 5 cm, cifra significativamente inferior que el 44% reportado a fines de noviembre. En el mismo sentido, el número de productores que reporta una situación muy crítica, altura menor a 3 cm, aumentó desde el 9% al 26% de productores. El evento climático “La Niña”, con una nueva primavera con marcada escasez en las lluvias y una primera mitad de verano con situación similar, muestra sus efectos sobre el crecimiento y la disponibilidad de pastura.
Cabe resaltar que en la percepción de los productores enero 2022 presenta el doble de establecimientos en situación crítica que en enero 2021 (26% por debajo de 3 cm frente a 12%). En cuanto a la situación de las pasturas sembradas y verdeos mientras que el 65% de los productores reportan que sus praderas están en un pobre estado; el 31% reportan que los verdeos de verano están en mala condición.
Dice el estudio presentado por Carlos Molina que “en relación directa con la sequía y el descenso en la disponibilidad de pasturas, los rodeos de cría mayoritariamente paridos y criando, muestran importante pérdida de estado corporal. Mientras que en noviembre el 25% de los productores reportaban una CC mayor a 4, en enero este valor descendió a 12%. Los rodeos en condición crítica, por debajo de 3,5 se duplicaron llegando al 13%. Luego de la mejora en las condiciones climáticas y la aparición de más pasto y más verde la toma de decisiones puede ser clave para intentar lograr mayores niveles de preñez sobre el final del período de entore”.
“El diagnóstico de actividad ovárica (DAO) y el uso de parches o etiquetas pueden ser alternativas de medición objetiva de la situación a evaluar. Si bien son pocos, aquellos productores que realizaron DAO en su rodeo, los datos nos alertan acerca del estado del mismo respecto a su situación reproductiva” recomienda.
