Por Yonnatan Santos, enviado a Kiyú, San José

En el marco de la charla “Genética para una ganadería sustentable” de la Sociedad de Criadores de Hereford y el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria, José Velazco, expuso sobre la cuantificación de metano entérico en la Central de Pruebas de Kiyú, a lo cual denominó como la bolilla que faltaba.

“Hay un montón de trabajo que se viene realizando desde 2014 con la eficiencia de los animales, y las emisiones de metano están muy relacionadas” explicó.

Velazco sostuvo que de cumplirse las proyecciones de crecimiento demográfico mundial, el compromiso tiene que seguir siendo el abastecimiento de alimentos seguros y diferenciados a una población mundial que se multiplica, empleando recursos naturales finitos y con compromisos ambientales impostergables. “Y al que no le guste, se puede ir a tomar café afuera” dijo.

El especialista planteó la pregunta ¿cómo se produce el metano durante la fermentación animal?

Y ahí mismo sostuvo que el metano tiene mucho que ver con el comportamiento, con rumiantes que tienen una capacidad distintiva, ya que fermentan celulosa para cubrir sus propios requerimientos, mediante microorganismos que vienen en el rumen. Todo este proceso deja como resultado la formación de ácidos grasos volátiles, CO2, metano y células microbianas.

Según presentó, del 100% del alimento que consume un animal en un sistema de carne con pasturas fibrosas, sólo el 3% se transforma en producción del animal, luego el 43% se transforma en producción de calor, 40% en bosta, 3% en orina y 10% en metano.

Esa mayor cantidad de emisiones se puede contrarrestar con distintas medidas de mitigación, tanto a nivel de alimentación y manejo (como en suplementos y aditivos nutricionales), así como en genética animal y selección. Este último punto se puede lograr con animales que emitan menos metano, es decir, que produzcan más emitiendo lo mismo, por ser más eficientes en el uso del alimento.

Allí presentó un estudio, realizado ganado lechero, dónde tras 10 años de selección, se logró una reducción del 20% en las emisiones de metano, pero con una desaceleración en atributos de producción.

Por eso es que la Sociedad de Criadores de Hereford está marcando tendencia en la materia, comenzando en los últimos meses una cuantificación de los animales de la Central de Pruebas de Kiyú, en base emisiones de metano entérico.

Es un método no invasivo capaz de medir a varios animales en su ambiente de producción durante prolongados periodos de tiempo. Es un equipo móvil y con bajos requerimientos de mano de obra y poca demanda de tiempo en el laboratorio.

Se miden dos aspectos, por un lado la emisión de metano por kilo consumido y por otro por kilo ganado.