El índice de precios de los productos lácteos de la FAO se situó en un promedio de 149,8 puntos en junio, es decir, 5,9 puntos más que el valor de mayo (4,1%) y 29,9 puntos por encima de su valor de junio de 2021 (24,9%). Todos los precios internacionales de los productos lácteos aumentaron, principalmente debido al aumento de las importaciones. La ola de calor en Europa propició la preocupación por el suministro de productos lácteos, especialmente en una región en la que la producción se encontraba baja.

Uno de los bienes más afectados por esta situación es el queso, haciendo que los precios aumenten. En cuanto a la leche en polvo, el aumento de precios obedece no solo al aumento de las importaciones, sino que también a la escasez en la oferta mundial y los bajos niveles de existencias. Por último, los precios internacionales de la manteca aumentaron por la alta demanda —especialmente la demanda interna en Europa— dada la incertidumbre de los mercados.

Por otro lado, el índice general de precios de los alimentos de la FAO en junio de 2022 se ubicó en un promedio de 154,2 puntos, con un descenso de 3,7 puntos porcentuales (2,3%) respecto al valor de mayo. Si bien el precio de los productos lácteos y de la carne aumentaron, los precios internacionales de los aceites vegetales, cereales y azúcar descendieron llevando a la tercera caída consecutiva del índice de alimentos. No obstante, se encuentra 23,1% por encima de su valor de hace un año.

El Índice de Precios de Alimentos de FAO es un índice que recoge los precios de los cinco principales grupos de alimentos básicos en los mercados internacionales (cereales, carne, productos lácteos, aceites vegetales y azúcar) ponderado por los respectivos intercambios comerciales internacionales. Fuente: FAO