Días atrás el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Ing. Agr. Fernando Mattos, y el ministro de Desarrollo Social (MIDES), Dr. Martín Lema, se reunieron para analizar la situación del proyecto de fomento del rubro ovino que llevan adelante ambas carteras y sus posibles cambios a futuro. Se definieron dos líneas de trabajo: la primera referida a los plazos de repago de los ovinos y la segunda se enfoca a una mayor participación de las demás sociedades de criadores de razas ovinas.

El Ing. Carlos Rydström, director de Desarrollo Rural del MGAP; dijo que el proyecto comenzó a desarrollarse a finales de 2020, cuando “incorporamos al Ministerio de Ganadería a través de la Dirección de Desarrollo Rural y al SUL a un trabajo que ya venía haciendo el MIDES junto con la Sociedad de Criadores de Corriedale; luego le sumamos el trabajo de las Intendencias de Artigas y Río Negro, así como la participación del Plan Agropecuario y también del INIA para algunos temas en particular”.

Actualmente existen 12 grupos de productores, ubicados al norte del Río Negro, que reciben asistencia técnica grupal, capacitación e inversiones para el trabajo con las majadas, “como pueden ser los bretes móviles, por ejemplo”.

El proyecto apunta a pequeños productores rurales, pero también a asalariados rurales y a sus familias, donde en muchas oportunidades es la mujer y los jóvenes quienes trabajan el rubro. Rydström indicó que la intención es que, “a través de esta dinámica de grupo, puedan conocer el rubro ovino, trabajar, profesionalizarse y luego también comercializar en conjunto y lograr a partir de ello una inserción en las cadenas laborales”.

Dentro de las líneas de trabajo trazadas a futuro, el director de Desarrollo Rural del MGAP dijo que se planteó un cambio en el sistema de pago a través de Microfinanzas República y una ampliación en la participación de las sociedades de criadores de ovinos en el proyecto, que actualmente cuenta únicamente con la raza Corriedale.

“El financiamiento que actualmente se realiza a través de República Microfinanzas tiene una lógica de pago mensual y entendemos que esto debe acompañar los procesos productivos, así como la comercialización” dijo el jerarca. En este sentido informó que “la financiación debe estar atada a la comercialización para así disminuir la comercialización informal”.

En cuanto a la participación “de exclusividad que actualmente hay con la Sociedad Criadores de Corriedale”, Rydström dijo “entendemos la importancia que tiene la Corriedale y el corredialismo en nuestro país, pero desde un punto de vista productivo debemos abrir el abanico a otras razas, a otras sociedades de criadores en las cuales las majadas que se brindan a estos productores puedan ser más diversas y apuntar a otros objetivos productivos, como pueden ser razas de producción intensiva de carne, por ejemplo”.

Faena predial

Uno de los grandes temas que se han venido cuestionando por parte de los pequeños productores es la prohibición de la faena a nivel predial para la comercialización, principalmente a fines de año. Esto se debe a que los bajos volúmenes de producción, por sus escalas, no les permiten llegar a una planta frigorífica y, por ende, a los canales de comercialización formales.

Ante esto, Rydström dijo no desconocer la realidad del país y que “en el marco del Sistema Nacional de Innovación y Desarrollo Rural” se ha generado una “comisión especializada liderada por el SUL con participación de INAC, obviamente el Ministerio de Ganadería y el Plan Agropecuario” para buscar “mejorar los canales de comercialización de estos productores en particular y mecanismos en general”.

Explicó que se viene trabajando en una consultoría brindada por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), donde se está mapeando la ubicación de los grupos de productores y qué “posibilidades tienen de comercialización”. En este sentido dijo que se está dialogando con “otros actores privados, como pueden ser compartimentos, productores de la zona que sí tienen escalas como para embarques individuales donde poder incorporar a estos productores”.

El director de Desarrollo Rural dijo que “es fundamental” lograr que los pequeños productores puedan ingresar a los canales formales de comercialización, “debemos empezar a trabajar cada vez más como sociedad para apretar por el otro lado, porque la realidad es que ese modelo de comercialización informal que hacen productores honestos y de trabajo, es el mismo que utilizan los delincuentes que realizan abigeato y que introducen por esa misma vía”.

Una alternativa que se impulsó desde el Instituto Nacional de Carnes (INAC) en la pasada administración fue el camión de faena móvil, que no se logró poner en funcionamiento. Rydström dijo que “el problema que tiene el camión de faena móvil es la habilitación sanitaria por parte del Ministerio de Ambiente”. Explicó que se debe tener en cada lugar donde el camión realice faenas una inversión que permita un control de los efluentes de una faena, lo cual hace inviable su utilización.

“La inversión para hacerlo operativo legalmente es mucho mayor que la que se pensaba y en ese tipo de cuestiones o errores que por ahí se cometen, estamos tratando de empezar desde cero chequeando, incorporando a todos los actores, como para que las cosas salgan y salgan bien y no tengamos lamentablemente esa idea que viene desde hace mucho tiempo pero con difícil aplicación”, dijo Rydström.