En la estación experimental San Antonio, de la Facultad de Agronomía, se realizó un estudio sobre el comportamiento meteorológico en el departamento de Salto. Dicho trabajo estuvo a cargo de la Ing. Agr. Celmira Saravia, quien señalo que el promedio anual de los últimos 50 años son 1.400 milímetros y que los totales sufren una muy baja variabilidad.

La profesional que está a cargo del estudio de las variables meteorológicas, como las precipitaciones, temperatura del aire, entre otras, dijo: "Hemos estado analizando cómo han evolucionado los últimos 50 años con el fin de calcular algunos índices climáticos, por eso se usó una serie tan larga de datos diarios de precipitación, temperatura máxima y temperatura mínima del aire para ver si han sufrido una transformación, si tienen una tendencia a subir o a disminuir".

Según el trabajo, hasta agosto de 2021, "los totales anuales de precipitación en Salto, el promedio total anual de esos 50 años, son 1.400 milímetros al año". Y agregó que "la precipitación en los totales anuales sufre una baja variabilidad". En este marco indicó que en la serie existen picos extremos, las "precipitaciones en el año 2002 se vieron cerca de 2.400 milímetros acá en la Estación Experimental en Salto, fue muy parecido en Rivera llegaron a llover 3.000 milímetros", en tanto que en "2007-2008 llovieron 700 milímetros".

Más allá de los vaivenes, "la tendencia es que, en 50 años, más o menos, siempre volvemos a ese promedio" de 1.400 milímetros, indicó Saravia.

La temperatura

El trabajo también incluye la medición de las temperaturas, donde a diferencia de la creencia social, las temperaturas máximas no han tenido un aumento significativo. Sin embargo, mencionó que existe un aumento de un grado y medio en las temperaturas mínimas, en concordancia con lo que ocurre también a nivel mundial.

Saravia indicó que dos indicadores muy importantes, respecto al cambio climático. En primer lugar, se han incrementado los días donde las temperaturas superan los 25 grados, que es el nivel máximo de confort del cuerpo humano, principalmente en los últimos 20 años. "No es que haga más calor, no es que hay más temperaturas más altas. Las temperaturas 37º, 40º, 39º siguen ocurriendo esporádicamente como ocurrieron siempre, no aumentó las máximas más altas”, explicó la profesional.

El otro de los puntos que señaló es el incremento de las "tropical nights", consecuentemente con el aumento de las temperaturas mínimas. Según explicó también se incrementaron la cantidad de noches donde las temperaturas superan los 20º, que es el punto de equilibrio para que tanto el cuerpo humano, como los animales, logren recuperar su punto de confort.