El trigo no encuentra en Córdoba un mejor escenario productivo. Todo lo contrario. Para esta siembra, que en la provincia arrancará el próximo mes, la superficie con el cereal será de 809 mil hectáreas, un 11% menos que la campaña pasada y 23% inferior al promedio del período comprendido entre 2007/2008y 2023/2024, según la primera estimación de la Bolsa de Cereales de Córdoba (BCCBA).
A partir de la información provista por colaboradores del Departamento de Información Agronómica (DIA) de la entidad, será la menor área con el de las últimas 11 campañas en la provincia.
La incertidumbre que genera la falta de lluvias, un elemento clave para el arranque de la cosecha (especialistas aseguran que se necesita 150 milímetros en el perfil para arrancar la implantación) y los números económicos del cultivo hacen que su inclusión en la rotación no motive al productor.
Si bien aún existen expectativas por las lluvias otoñales para tomar la decisión final de siembra, el precio y rentabilidad esperada del trigo, sumado al pronóstico de llegada de La Niña, explican la caída en la superficie que se sembraría con el cereal”, sostiene el informe de la BCCBA.
La presencia de La Niña durante la campaña pasada recortó la producción de trigo que fue la menor en 14 años, según los registros de la entidad bursátil.
Según el Instituto Internacional de Investigación para el Clima y la Sociedad, para el trimestre de abril, mayo y junio habría un 71 % de probabilidad de ocurrencia de un fenómeno climático neutro. Sin embargo, para los siguientes trimestres, comienza a surgir la posibilidad de ocurrencia de La Niña, la cual irá en aumento con el transcurso del año.
Ante esta situación, entidades rurales han solicitado al gobierno nacional eliminar la retención a la exportación del cereal (paga 12%), como medida para estimular la implantación, a partir de la deficitaria ecuación económica que ofrece en grano en la mayor parte de su región productiva. Fuente: La Voz del Interior