Con ligeras subas se negoció la soja en Chicago por la influencia que ejerció el mercado financiero tras el dato de inflación interanual en EEUU conocido el martes, que fue menor al previsto por los inversores, y frente a la perspectiva de una desaceleración del programa de suba de tasas ejercido por la Reserva Federal para contener el brote inflacionario, que estaba generando riesgos de recesión para la economía estadounidense.
Al respecto, cerca del cierre de la rueda la Fed confirmó lo que esperaban los operadores y subió la tasa de interés 50 puntos básicos, contra las 75 puntos de los meses precedentes. El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, advirtió este miércoles que es demasiado pronto para hablar de un recorte de las tasas de interés por parte del banco central estadounidense.
También aportaron a la tónica alcista de la soja el persistente déficit de humedad en zonas agrícolas de la Argentina, donde la siembra arrastra una fuerte demora respecto de 2021, y la nueva suba del valor del petróleo.
Sin embargo, las mejoras se vieron limitadas por las buenas expectativas para la cosecha de Brasil, y en particular para el Estado de Paraná, donde se elucubraba con que La Niña volviera a afectar de manera adversa la campaña por una eventual falta de humedad.
Al respecto, el Departamento de Economía Rural (Deral) dijo que Paraná tiene la mejor evaluación para la primera quincena de diciembre en cuatro años. “La cosecha está yendo bien, con lluvias regulares y con excelentes condiciones de campo, sobre todo para las siembras más tardías, a partir de octubre”, dijo el especialista de Deral, Edmar Gervásio. El contrato de la soja para la posición marzo cerró en US$ 546 por tonelada.
En tanto, el maíz cerró con leves bajas para sus precios en Chicago por la mala performance de EEUU en el mercado de exportación y –en contrapartida– por las mejores perspectivas planteadas el martes por la Asociación Nacional de Exportadores de Cereales de Brasil, que elevó de 5,40 a 6,72 millones de toneladas su estimación sobre las ventas externas brasileñas del cereal durante diciembre, contra los 5,27 millones de noviembre. A esto se agrega la debilidad del real frente al dólar, que favorece la competitividad de las ventas de Brasil. El contrato mayo 2023 perdió US$ 1, a US$ 256 por tonelada.
En tanto, los precios del trigo cerraron con bajas en Chicago y en Kansas, al igual que en el mercado europeo. Entre las razones bajistas se destacó la reanudación de los embarques de productos agrícolas desde el puerto ucraniano de Odesa tras los ataques rusos del fin de semana, según informó la Asociación Ucraniana de Granos. Esto se sumó a las buenas ventas desde Rusia y a la competencia –ahora algo menguada por la paridad dólar/euro y por la importante caída del trigo en las últimas semanas en EEUU– de la Unión Europea. Contrato del trigo marzo 2023 cerró en US$ 275 por tonelada en Chicago. Fuente: Granar