En el marco de la Jornada de Cultivos y Sistemas de INIA y FUCREA, el Ing. Agr. Gonzalo Invernizzi, integrante de la Comisión de Asesores Agrícolas Ganaderos de FUCREA, informó que en la zafra 2021/22 el rendimiento más alto del país para la soja de primera en campos de Grupos CREA se ubicó en el litoral sur. El promedio fue de 3.330 kilos por hectárea y hubo focos de buena producción en Mercedes, Libertad, Nueva Helvecia, Ombúes y Flores.
Los resultados de esta campaña de cultivos de verano correspondieron al tercer mejor año de soja de primera desde que FUCREA registra datos. La zafra récord fue en 2018/19.
El rinde más bajo del país para este cultivo se dio en los campos ubicados en el litoral norte, donde el rinde llegó a los 2.700 kilos por hectárea, indicó. En Paysandú se ubicaron los cultivos con menos rinde del país.
Según explicó Invernizzi, el cultivo de soja viene con una tendencia a aumentar el rendimiento año a año. Para la soja de primera el crecimiento es de 24 kilos por año, mientras que para la de segunda es de 27 kilos por año.
Pero también aumento la variabilidad. “Si miramos hacia atrás, antes había rendimientos de soja más estables que en los últimos seis años. Los últimos seis años hubo un serrucho importante, con récord de techos y récord de pisos, y un coeficiente de variación sumamente diferente a lo que fueron otros años”, dijo, y añadió que para toda la serie de registros de datos, la diferencia de rendimiento entre la soja de primera y la de segunda ha sido en promedio de de 280 kilos.
La diferencia de rendimiento depende de varios elementos, entre ellos la zona en la que se desarrolla el cultivo, el material genético utilizado, edad de chacra, si existía un cultivo antecesor y temas nutricionales. Uno de los elementos que destacó es que toda la zona productiva que tuvo mejores rendimientos tuvo muy buena presencia de lluvias en diciembre, lo que ayudó a mejorar el rendimiento de los cultivos. La lluvia acumulada –como se vio en años anteriores– sigue siendo la principal variable determinante del rinde. Más allá de cómo venga el año, hay variables de manejo que también influyen, como por ejemplo la fecha de siembra.
El comportamiento del maíz
En el caso del maíz, uno de los principales elementos que influye en el rendimiento es el tipo de año, por ejemplo si es año Niño, neutro o Niña.
En el caso del maíz de primera, “en un año Niña fuerte como fue este”, se podría esperar un rinde de 4.500 kilos por hectárea y lo que sucedió fue que se obtuvo un rinde de 4.000 kilos, 500 kilos por debajo de lo que se estimaba”.
Según previó, para la próxima campaña, la 2022/23, se puede esperar un rendimiento de 4.800 kilos por hectárea, aunque resaltó que el clima será determinante.
