La semana pasada cerró con resultados negativos para los valores de los granos en el mercado de Chicago, porque, temores recesivos que se potenciaron por la caída del PBI en Estados Unidos, sumados a la fortaleza que mostró el dólar, llevaron a que los granos gruesos tuvieran resultados a la baja. La caída de precios se dio también en sintonía con el desplome del precio del trigo por la situación en el Mar Negro, en la que el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania sigue afectando.
El trigo perdió más de 3,5% de su precio el viernes pasado, y eso se debió principalmente a las conversaciones que se están dando en el Mar Negro –intervenciones de la ONU y de Turquía para dar sostén al comercio en la zona– por la continuidad del corredor de exportación de granos ucranianos. Después de una jornada alcista el jueves, el mercado cerró la semana cambiando de signo.
Por otro lado, el valor del maíz bajó por la incertidumbre macroeconómica que se dio después de una inflación estadounidense más alta, que aumentó los temores de recesión y deprimió el mercado de este grano, y en parte también debido a la dinámica de la demanda de exportaciones, que ha estado “bastante débil”, según operadores del mercado.
La soja, por su parte, perdió cerca del 1%. Esa baja se explica, en primer lugar, por tomas de ganancias, y en segundo lugar por cierta fortaleza exhibida por el índice del dólar estadounidense (DXY). Una dinámica poco fluida de las exportaciones estadounidenses también ejerció sostén a las bajas.
Fuente: BCR