Aunque el calibre y los problemas sanitarios han complicado al cultivo de cebada este año, todo está encaminado a batir un récord en el rendimiento por hectárea en la campaña de invierno de 2023.

El máximo registro productivo para la cebada en Uruguay es de la zafra 2020 con kg/ha 4.791, pero los privados están manejando un rinde promedio sobre un eje de kg/ha 5.000-5.500 para la presente campaña.

Juan Foderé, indicó que luego que las malterías resolvieran bajar el estándar de calidad para procesar el grano, gran parte de la cosecha se comenzó a colocar. Además, también se está dando una importante oferta a nivel forrajero. “Va a ser un buen año para la cebada”, proyectó. El avance de cosecha en este cultivo se ubica sobre el 60%.

Por otro lado, las primeras chacaras de trigos también ya se están levantando. Diego Guigou, responsable de producción agrícola en Agronegocios del Plata-ADP, dijo a Informe Tardáguila que los trigos “están mejor sanitariamente que las cebadas”. Hay productores que han reportado rendimientos en chacras en un rango de kg/ha 6.500 a 8.500 en la red social X en las últimas horas.

En tanto, Juan Foderé, director de Fadisol, dijo todavía es prematuro proyectar rendimientos promedio para el cereal. Añadió que hubo chacras del litoral norte (Paysandú, Young) que registraron problemas por “bajo falling”, lo que determina que debe destinarse para forraje, ya que no tiene aptitud para los molinos. Sin embargo, en el litoral sur ese problema no se apreció esa dificultad en otras chacras, que “tuvieron buena calidad y rendimiento”. El año pasado, el rinde de trigo llegó a un récord de kg/ha 4.251, según la DIEA. Si no ocurre nada raro, es muy factible que en esta campaña se superará ese umbral, aunque habrá que aguardar por cuánto de esa cosecha tendrá la calidad para exportarse con aptitud para la industria molinera, en particular para Brasil.

La demanda de la industria molinera local es de unas 500 mil toneladas por año. Según la DIEA, durante la última campaña de invierno la intención de siembra se ubicó en 301 mil ha. Con un rendimiento promedio para el trigo sobre un eje de kg/ha 5.000, el país podría tener un saldo exportable próximo a 1 millón de toneladas.