La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), estimó en un informe que las políticas agrícolas a corto plazo, que apunten a ser respuesta a las crisis mundiales como las devenidas por la pandemia y la guerra entre Ucrania y Rusia, “deben abordar simultáneamente los retos actuales y las reformas que buscan luchar contra el cambio climático y las distorsiones en los mercados internacionales”.

Según detalla el informe, el 22% de las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial dependen del sector agrícola, por lo que se aconseja que se reduzca ese impacto mientras las producciones se adaptan al cambio climático; en ese marco se lamenta que la búsqueda del aumento de la producción se haga a menudo “en detrimento de la sostenibilidad”.

La OCDE advirtió sobre la entrega de apoyos públicos que “distorsionen el mercado” y, a la vez, contribuyan a aumentar las emisiones de gases, sin beneficiar a los agricultores

La organización estima que luego de varios meses de ataques entre Rusia y Ucrania, si bien la disponibilidad de alimentos y fertilizantes continúa siendo suficiente, el aumento de los precios está creando nuevos desafíos, tanto para productores como para consumidores.