Brasil es el octavo mayor importador de trigo del mundo y en 2021 se importaron 6,7 millones de toneladas para lograr satisfacer un consumo brasileño de 12,7 millones de toneladas, con previsión de alcanzar los 14 millones de toneladas en los próximos años.

A pesar de no lograr la autosuficiencia, el país continúa apostando a un incremento de la producción que, para este 2022, se estima alcanzar los 8,1 millones de toneladas, según Embrapa Trigo, con lo que se prevé logra satisfacer un 62% de la demanda brasileña.

De acuerdo con la institución de investigación, en 2015 Brasil cosechó 5 millones de toneladas. En 2020, la producción alcanzó 6,2 millones de toneladas. En 2021 llegó a 7,6 millones.

Por lo tanto, se espera que en 10 años, si la producción de trigo crece 10% anual, se pase de 8 millones de toneladas en 2022 a 20 millones en 2031, colocando a Brasil como potencial gran exportador del cereal.