Según el estudio sectorizado presentado por la Oficina de Programación y Políticas Agropecuarias (OPYPA) en su anuario, la soja durante el ejercicio 2019/ 2020 tuvo una producción que cayó 30%, con menores rendimientos, que cayeron 26% por déficit hídrico. Acompañando a esa baja en la producción, las exportaciones del  2020 disminuyeron 23%, aunque el precio aumentó desde mediados de año.

En cuanto a las proyecciones para la zafra que estamos atravesando, señalan que la producción podría aumentar 11% lo que sería un nuevo récord nacional, pero la incertidumbre está fijada por La Niña. Las exportaciones también crecerán, en este caso 11%, debido a menores existencias y una mayor demanda de China, lo que seguramente cause un aumento de precios. Para el 2022 se prevé una producción 5% superior.

Para el maíz, la producción de la última zafra cayó 6%, con menores rendimientos por falta de lluvias, mientras que no hay saldos exportables. Por su parte, el sorgo presentó una menor producción (-20%), y los precios de granos forrajeros aumentaron por menor cosecha y alta demanda para cría de ganado. Se espera para la zafra actual una caída en la producción tanto de maíz como de sorgo.

En cuanto al arroz, OPYPA confirma una producción estabilizada, con exportaciones que aumentaron 20% por restricciones a las exportaciones de principales productores, lo que elevó los precios. Para la próxima zafra prevé que la producción caiga 2%, mientras que la exportación caería 15%.