La Encuesta Agrícola de Invierno de DIEA dejó como saldo un fuerte recorte en la intención de siembra de la superficie total para la zafra 2023/24.
La intención de siembra de los cultivos de invierno para grano seco se estimó en 644.998 ha, unas 216 mil ha menos que en el invierno anterior cuando se implantaron 861 mil ha, un máximo en más de una década.
La intención de siembra para el trigo se estimó en 301 mil hectáreas, superficie prácticamente igual al sembrado en el invierno 2022.
Para la cebada, la DIEA estimó una siembra de 185 mil hectáreas, frente a las 211 mil de la zafra anterior.
En el caso de la colza se produce una caída importante de la superficie sembrada, estimándose una siembra en el entorno de las 150 mil hectáreas, menos de la mitad de las 348 mil ha de la campaña récord anterior. Esta disminución se asocia a factores como la caída del precio de la oleaginosa y las rotaciones de chacras por sanidad, según la DIEA.
Los privados daban como hecho una fuerte baja del área implantada con colza, pero la gran mayoría esperaba una superficie algo por encima de las 200 mil ha, y que buena parte del área que dejaba ese cultivo se pasara a trigo/cebada.
