El comentario de distintos intermediarios del mercado ganadero es que la oferta de ganado terminado especial “es muy poca” y que “no hay especulación” por parte de los productores para obtener algún centavo adicional por sus haciendas. Es la principal razón que está detrás del impulso que ha tomado el mercado del gordo una vez que la industria comenzó a finalizar la faena de ganado de corral para la cuota 481 (esta semana todavía se mantenía alguna planta con actividad con ganado terminado a grano).
La exuberancia forrajera que se tenía previo a las lluvias hoy no está, los ganados han sentido la falta de piso y han perdido kilos. “Hace 20 días que los ganados no tienen cama y esto pega bastante más que las heladas”, dijo una fuente.
Además, los verdeos no responden como se esperaba por el exceso de agua y “las avenas están amarillas en algunos casos”, graficó un operador. Asimismo, las praderas dejaron de pastorearse por falta de piso. Eso ha llevado a que hoy la industria esté dispuesta a aceptar ganados con algún faltante de terminación con una brecha de precios que se ha acortado bastante respecto a los animales especiales y pesados.
Las fuentes manejaron referencias por novillos especiales y pesados en un rango de US$ 3,70-3,80 por kg a la carne, pero una corriente mayor de negocios y oferta de novillos más livianos sobre un eje de US$ 3,60. “Hay muchos productores que optan por convalidar ese valor porque hoy no tienen la certeza si van a poder terminar esos ganados en el corto plazo, o también porque tienen alguna necesidad de liquidez para cubrir pagos”, explicó un operador a Faxcarne.
Por las vacas pesadas y especiales, las fuentes manejaron un rango de negocios de US$ 3,45-3,50 por kg a la carne, pero también hay ventas de carcasas más livianas en un rango de US$ 3,25-3,35 por kg. En tanto, la vaquillona especial para el abasto sigue demandada con valores que se ubican en un rango de US$ 3,60-3,65 por kg a la carne.
Pese a este repunte estacional en los valores de la hacienda, un operador advirtió que desde el exterior no se ven señales para proyectar que la industria frigorífica esté dispuesta a tensar un poco más la cuerda en cuanto a los valores de compra. “Todo apunta a que el corral va a tener un rol clave para suplir el pozo en la oferta de ganado a pasto que vamos a tener en las próximas semanas”, acotó. De hecho, las plantas que tienen sus propios corrales estaban completando y demandado novillos livianos para sus encierros a medida que iban faenando sus animales para la cuota 481.