Los ataques de perros a majadas fueron uno de los temas tratados en el 105ª Congreso Anual de la Federación Rural. Los productores ganaderos se reunieron con autoridades del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) y pidieron una solución urgente a un problema que aqueja a productores de todo el país: la muerte de lanares por ataques de perros sueltos.
Representantes del gobierno, de protectoras de animales y de seguridad rural dialogaron con los productores y escucharon sus reclamos. Varios de los productores expresaron su gran preocupación por este problema y pidieron que se avance en soluciones. Desde el gobierno se destacaron las acciones del Instituto Nacional de Bienestar Animal (INBA), como el chipeo y la castración de animales, aunque los productores reclaman que se haga algo con rapidez.
Durante su discurso en el acto de clausura del congreso, Mónica Silva, presidenta de la Federación Rural, indicó que “el problema de la superpoblación canina debe tener medidas hoy, no se puede seguir esperando”. Según mencionó, muchos productores han abandonado el rubro ovino, desalentados por estos ataques.
Varios de los productores que participaron del congreso coincidieron en que además de las pérdidas económicas que significan los ataques de perros a majadas, hay un daño en el ánimo por perder trabajo y avance genético en cada ataque.
El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, participó del congreso que se hizo en Tacuarembó y tras escuchar los reclamos de los integrantes de la federación, aceptó: “Tenemos un debe muy grande, que es el tema de los perros. Hay que comprometernos y comprometer a las intendencias en este trabajo, hacer el esfuerzo y avanzar, porque si se pone dinero pero no se aceita la máquina vamos a estar años y no van a quedar ovejas”.
