Guzmán Silva, integrante de Tops Fray Marcos, dijo que “la foto de esta primera parte de la zafra es que sobró lana fina”. En su análisis de la primera mitad de la zafra lanera 2024-2025, consideró que “la comercialización de lana fina fue muy puntual, en determinados momentos, determinados lotes y, por momentos, se va eligiendo algunos lotes de la pata”.
El integrante de la industria dijo que “no tenés una demanda fuerte de afuera en esta primera parte básicamente por una Europa, un poquito conflictiva últimamente”.
En el caso de las lanas medias y gruesas, “tienen una corriente de negocios que no es variable en el precio, siguen una constante de 60 centavos o 70 centavos el Corriedale, y ahí se vende; sí te corrés un centímetro, se terminó el negocio”, explicó. Desde su punto de vista, si el productor se adapta a esos valores, “sacás la lana del productor y la vendés. Eso para mí tuvo un flujo, desde agosto hasta ahora, muy ágil, muy rápido y es lo que se comercializa, sin discusión”.
Para la segunda mitad de la zafra, de febrero a julio, “la primera incógnita es cómo reaccionará Europa y la demanda para las lanas finas, para canalizar el volumen de lanas finas que está quedando”. En tanto que, para las lanas medias y gruesas, dijo que el mercado “va a seguir exactamente igual, moviendo el volumen que queda”.
La preocupación o la interrogante, es la demanda para las lanas finas y la colocación para una oferta que, en muchos casos, se sigue estando con lotes de dos o tres zafras guardados por parte de los productores.