La Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) firmará un acuerdo con varios actores de la cadena lanera, el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), Uruguay XXI y el Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), la Dirección Nacional de Deportes y el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca para que la vestimenta formal que utilice la delegación uruguaya en el Mundial de Qatar 2022 se haga con lanas uruguayas.

La iniciativa, que surgió desde el sector privado, ya está en marcha. Lanas Trinidad exportó lanas ultrafinas a Italia, donde se hilaron y se produjeron las telas necesarias para confeccionar los trajes para los jugadores de la selección, el cuerpo técnico y los directivos, informó a El Observador el presidente de la AUF, Ignacio Alonso.

Según dijo, con estos trajes se podrá “destacar la calidad del producto uruguayo” en la competencia mundial que se desarrollará entre noviembre y diciembre. “Queremos tener una representación más allá de lo deportivo. Tenemos al sector productivo atrás”, dijo el dirigente.

El Dr. Juan Pérez Jones, presidente del Consorcio Regional de Innovación de Lanas Ultrafinas (CRILU), confirmó que se realizarán “los trajes formales de toda la selección de Uruguay con lanas que se produjeron en nuestro país” y aclaró que estas lanas no son exclusivamente de productores integrantes del consorcio.

“Las telas con las que se van a hacer los trajes formales de la Selección Uruguaya para Qatar son de lanas producidas en Uruguay”, dijo Pérez Jones. Explicó que las lanas producidas en Uruguay fueron lavadas y peinadas por la industria topista uruguaya y se exportó en tops de 17,2 micras a Italia donde fueron procesadas.

Ayer, tras reuniones con integrantes de dicha comisión de trabajo, el productor dijo que el próximo paso será transformar esas telas, por un diseñador uruguayo, en los trajes que utilizará toda la delegación, que son más de 70 unidades.

Con esta iniciativa se busca dar a conocer en el mundo la marca sectorial Uruguay Wools, con la que se plantea contar cómo es la forma de producir, acondicionar y comercializar lana en el país.

En la historia de la producción de este tipo de lanas en Uruguay y particularmente del CRILU, hay varios pasos que fueron marcando. En su momento el principal de Lanas Trinidad, Pedro Otegui, presentó en una actividad en INIA Tacuarembó un buzo de hilo, confeccionado en Italia y que en su etiqueta se podía observar “Hecho con lanas Merino de Uruguay”. 

Luego fue también de destaque el trabajo con una diseñadora europea, que presentó una línea de ropa femenina en base a telas producidas con lanas merino de Uruguay. Este nuevo paso es el “resultado de 20 años trabajo”, dijo Pérez Jones.

“Era algo que veíamos en el mercado, que el consumidor final tenía preferencia a pagar más por prendas hechas con este tipo de lanas y fue lo que abrió la puerta hace 20 años con el proyecto merino fino y la idea era lograr producir esas lanas en nuestro país”, dijo el productor, quien además recordó que “uno de los principales usos de estas lanas son los tejidos planos con los que se van a hacer estos trajes”.