La cosecha de colza avanza con fuerza y deja sensaciones mejores de lo previsto. El productor agrícola Gabriel Carballal contó que ya terminó los primeros lotes implantados y que solo le resta un 20% de área que se sembró más tarde, mientras que el boca de urna de la cebada fue alentador.
Lo que ya trilló mostró resultados muy superiores a lo esperado, con rendimientos arriba de kg/ha 2.000 en todos los potreros. En total, cosechó unas 200 ha.
En materia comercial, Carballal había adelantado un volumen importante de venta de colza a US$/ton 500: "Todas las ventas las hice ahí”, dijo. Lo que queda por vender podría corregirse levemente a la baja, dependiendo de los análisis de calidad.
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La cebada también comenzó a entrar, aunque con humedad alta, lo que obligó a pausar y volver a evaluar. El primer potrero dejó un resultado muy auspicioso: esperaba kg/ha 4.500 y terminó casi kg/ha 700 arriba. “Como arranque, muy bueno”, comentó. Aun así, aclaró que es prematuro sacar conclusiones: hay cebadas mejores, similares y también más flojas. “Es un boca de urna muy aventurado porque es el primer potrero que trillo. En una semana lo voy a tener más claro”, dijo el empresario a Informe Tardáguila.
En calidad, el inicio vino con una alerta: de los seis camiones de cebada que envió, uno ya fue rechazado. “Estamos con un 16% o 17% de rechazo si se analiza ese número… pero aún es muy prematuro para sacar conclusiones”, señaló. Reconoció que la mezcla entre cebada cervecera y forrajera es un problema recurrente: “Hacemos todo como si fuera cebada… y cuando cosechamos, algo es cebada y algo es forraje”.
En trigo aún no entró a cosechar. Los cultivos vienen “muy bien” y están alargando ciclo, lo que debería favorecer calidad y llenado, valoró Carballal.
Pero en precios el escenario es complejo. En cebada, con valores de US$/ton 195–200, el punto de equilibrio se ubica cerca de kg/ha 4.500. En trigo, con precios de US$/ton 190, el equilibrio trepa a kg/ha 4.700–4.800. “Difícil, muy difícil”, resumió Carballal, entre el entusiasmo productivo y la presión de los números.
