Cargill ha alcanzado un nivel sin precedentes en el mapeo de proveedores en América del Sur, informó la compañía. Desde el primer semestre del año, todos los cereales que son comprados a los productores en forma directa pueden ser rastreados al 100%.
La trazabilidad es un gran paso de la compañía en su compromiso por desarrollar cadenas de suministro libres de deforestación y conversión para 2030. Además de localizar el origen de los cereales, es posible identificar también oportunidades de desarrollo sustentable junto a los productores. En esta oportunidad se mapearon cerca de 32 mil campos, donde más del 50% están localizados en Argentina, Bolivia, Paraguay y Uruguay y son proveedores directos de cereales para el negocio agrícola de Cargill en la región.
La cartografía utilizada en el monitoreo se basa en tecnología geoespacial, basada en polígonos de todos los límites de los campos de sus proveedores directos. En la práctica, esto significa una mayor precisión para conocer el origen de esos granos. Si se identifica algo que no está de acuerdo con las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) y los requisitos internacionales, Cargill puede trabajar con el productor en programas de mejora continua de agricultura regenerativa, pago por servicios ambientales, proyecto de financiamiento verde, regularización de propiedades, entre otros.
El mapeo se realizó sobre la base de todos los productores que entregaron volúmenes al negocio agrícola de la compañía en junio de 2021 y mayo de 2022. El objetivo ahora es el mantenimiento constante de este monitoreo en la región, ya que, con cada cosecha, se incluyen nuevos proveedores en la cadena.
"Lograr esta trazabilidad muestra cuán comprometido está Cargill con la transparencia y la creación de una cadena de suministro cada vez más sostenible. Nos permite conocer a fondo a nuestros productores, valorando sus prácticas sostenibles y fortaleciendo nuestra relación con ellos. Esta información es importante para identificar oportunidades de mejora y ofrecer más transparencia a nuestros clientes en todo el mundo, conectando así toda la cadena alimentaria", dice Letícia Kawanami, directora de Sostenibilidad del Negocio Agrícola de Cargill en América del Sur.