En las últimas horas el responsable del área de investigación y desarrollo de semillas de ADP, Ing. Agr. Manuel Artigas, dialogó con Campo al Día (Radio Montecarlo) y sostuvo que “las recientes precipitaciones frenaron el avance de la siembra de Colza y de Trigo, que venía avanzando bastante ya que estamos en plena época”.

Sobre estos cultivos, dijo que “la colza está sobre el fin de época de siembra, el trigo comenzando en su periodo más fuerte de siembra  y la cebada es lo único que luego de estas lluvias va a arrancar fuerte”.

“En cuanto a consideraciones técnicas a posteriori de las lluvias, imagino que el área sembrada seguida a la cosecha de verano debe ser revisada desde el punto de vista de la germinación, mientras que lo que se sembró hace 10-15 días estaría muy bien, porque había en ese momento buenas condiciones de implantación” dijo, señalando que “una vez que haya piso de nuevo, en los próximos días se va a sembrar fuerte”.

Al ser consultado sobre el momento actual para los cultivos, dijo que “si hablamos de Colza, la fecha de siembra tiene unos días más, pero el tema que nos corre la cosecha a mediados de noviembre, lo que nos lleva a no aprovechar esa ventaja competitiva que tiene, para poder hacer una soja de segunda en fecha de siembra en primavera”.

“En cuanto al trigo, te permitiría hacer una especie de ajuste en tu sistema para poder, aún con fecha de siembra más tardía”.

La cebada está entrando recién en su periodo de siembra, por lo que no habría problemas.

Respecto a temas netamente comerciales, sostuvo que “este año hubo una sorpresa grata con el trigo producto de los que fue una campaña muy particular, porque pasó algo nunca visto, que fue que se acabó la semilla de colza, y nosotros la agotamos rápidamente a fines de abril. Eso llevó a que el productor se inclinara fuertemente por el trigo, sobre todo por tener buena condiciones de siembra para la fecha óptima y más después de la cosecha de lo de verano”.

La colza viene ganando terreno

Sobre el comportamiento de la Colza, Artigas dijo que “tiene un montón de argumentos desde el punto de vista  económico del negocio hasta desde el punto de vista agronómico, porque se trata de un cultivo que en la rotación entra muy bien y no se superpone con el cultivo anterior ni el subsiguiente, lo que permite cosechar tranquilamente.

Desde lo económico es un cultivo que ha sido rentable en las últimas campañas y es un bueno cultivo para adoptar en invierno para meter en el sistema y la gente lo sabe aprovechar.