Tras completar el viernes la quinta semana bajista consecutiva, la soja logró este lunes un importante repunte en Chicago. Además de un lógico movimiento técnico, pronósticos de lluvias menores a las necesarias sobre zonas de Brasil que arrastran un prolongado déficit hídrico apuntalaron la tónica alcista. El contrato de enero ganó US$/ton 12 y quedó en US$ 491, mientras que la posición julio 2024 cerró a US$/ton 503 (+ US$ 10).
Según los modelos predictivos estadounidense y europeo, durante los próximos diez días se espera que las precipitaciones sean inferiores a la media sobre buena parte de las regiones agrícolas de Brasil. "Esto se confirma principalmente en el centro-oeste, donde comienzan a complicarse los cultivos y donde se espera que la cosecha disminuya. La estimación del Grupo Labhoro para la cosecha de soja brasileña es de 157 millones de toneladas, por debajo de los 161 millones publicados por el USDA en su informe del viernes. Y el mercado puede seguir reaccionando, dependiendo de las proyecciones climáticas mostradas por los modelos", dijo Ginaldo Sousa, analista del Grupo Labhoro, al portal brasileño Noticias Agrícolas. Agregó que el fin de semana fue predominantemente seco en Brasil.
La consultora AgRural relevó el avance de la siembra de soja brasileña sobre el 91% del área estimada, frente al 85% de la semana anterior y al 95% de igual momento de 2022. "Aunque la mayor preocupación sigue estando en Mato Grosso, donde las precipitaciones continúan siendo inferiores a lo normal y las temperaturas muy altas siguen comprometiendo la productividad, la región norte/noreste del país también es motivo de preocupación, ya que las precipitaciones dispersas y el calor dificultan el avance de la siembra y dañan el desarrollo inicial de los cultivos", advirtió la firma.
En su informe semanal sobre la inspección de embarques estadounidenses, en esta ocasión para el segmento del 1 al 7 de diciembre, el USDA relevó este lunes despachos de soja por 984.410 toneladas, por debajo de las 1.173.257 toneladas del reporte anterior, pero dentro del rango previsto por el mercado, de entre 700.000 y 1.600.000 toneladas. En sus partes diarios, el USDA confirmó este lunes una nueva venta de soja 2023/2024 a destinos desconocidos, por 132.000 toneladas.
Por otro lado, tras completar el viernes dos semanas alcistas seguidas, el trigo cerró el arranque de la semana con importantes bajas en el mercado estadounidense, por una clara postura vendedora de los inversores, que se entregaron a una toma de ganancias frente a la chance de que el aluvión de compras chinas visto durante el segmento comercial precedente –las operaciones totalizaron 1,12 millones de toneladas– se haya agotado. El contrato de marzo en Chicago cerró a US$/ton 223 (-US$ 8).
También influyó sobre las plazas estadounidenses la apreciación que viene mostrando el dólar frente al euro, que afecta la competitividad de las exportaciones de sus materias primas. Y sobre el mercado internacional pesó el ingreso de la nueva cosecha de Australia. Vale recordar que el viernes el USDA revisó al alza el volumen de la cosecha australiana 2022/2023, de 39,69 a 40,55 millones de toneladas, en tanto que el cálculo de la producción 2023/2024 fue incrementado de 24,50 a 25,50 millones y de las exportaciones, de 17,50 a 18,50 millones.
En su informe semanal sobre la inspección de embarques estadounidenses el USDA relevó este lunes despachos de trigo por 281.697 toneladas, por encima de las 187.955 toneladas del reporte anterior y dentro del rango manejado por los operadores, que fue de 190.000 a 400.000 toneladas.
Fuente: Granar Research