Tras una apertura con fuertes subas –llegaron hasta los 11 dólares por tonelada–, los precios de la soja concluyeron la jornada con ligeras ganancias en Chicago. Entre las razones del movimiento alcista inicial se destacó el prolongado déficit de humedad sobre amplias zonas agrícolas de la Argentina, donde la siembra se mantiene muy demorada. En opinión de los operadores, el USDA deberá reducir en su próximo informe mensual la expectativa sobre el volumen de la cosecha argentina de soja desde los 49,50 millones de toneladas sostenidos hasta el reporte de diciembre para ubicarla entre 43 y 45 millones de toneladas. A esto se agregó la falta de humedad en el sudoeste de Brasil, país que, sin embargo, sigue encaminado a obtener una cosecha récord.

Al respecto, en su relevamiento semanal, la Conab marcó el lunes el avance de la siembra de soja sobre el 97,6% del área estimada en Brasil y dijo que en Mato Grosso lluvias amplias y voluminosas favorecieron el desarrollo de los cultivos y la recuperación de la humedad del suelo e indicó que la recolección comenzó en algunas áreas puntuales de ese Estado. En Paraná, el 90% de lo implantado está en buen estado y un 18% está llenando granos.

También aportó inicialmente a la tónica alcista cierto relajamiento en la estricta política de control sanitario por los brotes de covid en China, que podría dar aire a la demanda de productos como la soja y sus derivados. Sin embargo, en torno de esta cuestión hay más dudas que certezas, por lo que su influencia sobre los precios se fue reduciendo con el paso de las horas.

La devaluación del real frente al dólar también limitó la corriente alcista del mercado, dado su impacto positivo sobre la competitividad de las exportaciones de Brasil.

En su informe semanal sobre la inspección de embarques, en esta ocasión para el segmento del 16 al 22 de diciembre, el USDA relevó ayer despachos de soja por 1.753.085 toneladas, por debajo de las 1.963.322 toneladas del reporte anterior. El contrato marzo 2023 de la soja en Chicago cerró a US$ 547 por tonelada.

Con valores en alza cerró el maíz la rueda de Chicago, donde también impactaron en forma alcista las condiciones climáticas en Sudamérica, con déficit de humedad en buena parte de las zonas agrícolas de la Argentina y con lluvias insuficientes en el sudoeste de Brasil. Sobre eso último, en su reporte semanal, ayer la Conab indicó que las lluvias caídas recientemente sobre Rio Grande do Sul ayudaron en la recuperación de algunos cultivos, pero no lograron revertir las pérdidas ya consolidadas de cara a la primera cosecha de maíz. En este estado clave para el maíz temprano la siembra avanzó sobre el 89% del área prevista, frente al 92% de igual momento de 2021. La posición mayo 2023 del maíz subió US$ 3,25, a US$ 265 por tonelada en Chicago.

Finalmente, los precios del trigo cerraron con altibajos en el mercado estadounidense y con alzas en el mercado europeo. Entre los factores que influyeron se destacó la ola polar que afectó, entre otras zonas de Estados Unidos, las Grandes Planicies trigueras en los últimos días y que podría haber dañado los cultivos de invierno que no lograron ser cubiertos por una capa de nieve capaz de resguardarlos de las temperaturas extremas. En la espera de una evaluación de daños, ahora los pronósticos para la región auguran un paulatino ascenso de las temperaturas hasta marcas que podrían ubicarse por encima de los registros normales para la época. Como agravante para esta situación, vale recordar que Kansas, el principal Estado productor de trigo, mantiene casi toda su superficie bajo condiciones de sequía. La posición marzo 2023 del trigo cerró a US$ 284,5 por tonelada en Chicago. Fuente: Granar Research