Los funcionarios indonesios criticaron la propuesta de la Unión Europea de una regulación que, según dicen, niega más de una década de progreso del país del sudeste asiático para cumplir con las normas de madera sostenible de la UE.
Bajo un acuerdo de asociación voluntaria, firmado en 2011, Indonesia desarrolló un sistema, conocido como SVLK, para verificar la legalidad de sus exportaciones de madera a la UE. La UE reconoció el SVLK de Indonesia en 2016, lo que le permitió al país emitir lo que se conoce como licencias de Cumplimiento de las Leyes, Gobernanza y Comercio Forestales (FLEGT) para productos de madera destinados a la UE.
Hasta la fecha, Indonesia es el único país con este reconocimiento formal de los 15 países que tienen un acuerdo de legalidad de la madera o están en proceso de negociación de un acuerdo de asociación voluntaria con la UE.
Se supone que el sistema favorecerá a los productos de madera de Indonesia destinados al mercado de la UE, otorgándoles acceso por “línea verde" que los exime de un proceso de diligencia debida por separado en los puertos europeos.
Pero un nuevo proyecto de ley de deforestación de la UE presentado por la Comisión Europea en noviembre de 2021 amenaza con deshacer todo ese progreso al someter una vez más las importaciones de madera de Indonesia a la UE a controles estrictos a su llegada.
Esto ha mantenido en tensión el comercio entre dos países y algunas autoridades indonesias han manifestado su disgusto con las decisiones de la Unión Europa, pidiéndole al gobierno que no se deje manipular por los deseos del viejo continente.