Luego del impacto sufrido por la pandemia, la exportación de chips (uno de los productos que registró mayor caída en volumen y precio de exportación) no ha logrado volver a sus valores de prepandemia.

Entre otros factores que impiden el regreso a los niveles prepandemia, está el aumento en producción de chips por parte de Europa, principal productor a nivel mundial, que tiene como metas firmes caminar hacia la generación de energías renovables y, en este camino, ha tomado medidas para incentivar la industria y la producción de chips.

Las exportaciones de chips uruguayas a Portugal en los primeros cinco meses de 2021 cayeron 31% en comparación con igual período del año pasado, medido en BMDT (bone dry metric tones), mientras que, en valor, registraron una caída de 35%, generando una facturación de US$ 13,6 millones.

China, destino sin precedentes para este tipo de exportación, compró el producto por el equivalente a US$ 6,61 millones. Si bien el precio pago en China, en US$/BDMT, es levemente menor que aquel que se obtiene en Portugal, la aparición de este destino no deja de representar una bocanada de aire fresco para este momento.